Varios motores acabados de lanzar deberían ser «capados»
El auge de las bicicletas eléctricas ha llevado el MTB al centro de atención del público general, con consecuencias positivas y negativas para el deporte. Mientras más ciclistas llegan a la montaña gracias a la ayuda eléctrica, los excesos cometidos por usuarios irresponsables están generando preocupaciones regulatorias que podrían impactar directamente en la industria.
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El ZIV es un organismo muy influyente en Europa
El organismo alemán Zweirad Industrie Verband (ZIV), muy influyente en Europa, ha propuesto recientemente limitar la potencia máxima de las bicicletas eléctricas, conocidas técnicamente como EPAC, a 750 vatios. Esto afectaría directamente a modelos equipados con motores como el DJI Avinox (que justo ha anunciado una actualización que le da 1.000W de potencia de forma constante en modo Turbo), utilizado en bicicletas como la Amflow PL Carbon, la nueva Unno Mith o la recién presentada Megamo Reason, obligando a clasificarlos como ciclomotores.
Las consecuencias serían significativas en muchos países que, por ejemplo, tendrían que registrar sus bicicletas, pagar impuestos como los vehículos a motor, obtener licencias específicas y utilizar cascos homologados para motocicletas.