Schwalbe se ganó la fama de neumáticos débiles a causa de las gomas ultraligeras que muchos fabricantes optaban por montar en sus bicis de serie para bajar peso
Schwalbe ha dado una lavado de cara total a su gama de neumáticos. No en cuanto a su gama de dibujos, que ya está muy conseguida y consolidad, sino en cuento a gomas y construcción de sus cubiertas. La llegada de los compuestos Addix, en diferentes configuraciones de dureza y durabilidad, ha venido acompañada de cambios en su carcasa para conseguir mejorar la resistencia a los pinchazos. Schwalbe se ha conocido en los últimos tiempos por la ligereza de sus neumáticos, especialmente porque muchos fabricantes optaban por sus gomas más ligeras para montarlas en sus bicicletas de serie, y así bajar el peso global de la bicicleta. Eran neumáticos de carcasas muy finas y poco resistentes, lo que al final le ha acabado repercutiendo en la imagen de la marca, que muchos asocian a gomas débiles. Pero lo que no todos conocen es que Schwalbe cuenta con diferentes tipos de carcasas, y las más resistentes, las SnakeSkin, están a la altura de los neumáticos más resistentes del mercado.
Hemos puesto a prueba a uno de sus modelos emblemáticos, el Schwalbe Rocket Ron, una cubierta ideal para terreno húmedo y suelto que ahora está disponible en multitud de opciones.
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