Portada Noticias Productos Tests Vídeos Contacto Buscar
ESMTB.com - mountain bike

¿Tienen más sentido las ruedas de 32″ en gravel que en MTB?

Las ruedas de 32” han aparecido en prototipos de MTB, pero su mayor lógica podría estar en el gravel, donde la rodadura continua y la velocidad de crucero son más importantes que la aceleración o el peso.

Las 32″ podrían ofrecer sus ventajas reales en el gravel, no en el MTB

El debate sobre las ruedas de 32 pulgadas ha vuelto a encenderse tras la aparición de varios prototipos en el mundo del MTB. Aunque de momento son solo pruebas experimentales, la idea de un tamaño superior al 29″ no deja de despertar curiosidad. Sin embargo, puede que el terreno donde realmente tengan futuro no sea el MTB, sino el gravel.

Continúa tras los patrocinadores



Prototipos de MTB que buscan más inercia y estabilidad

En MTB los cambios de ritmo y el peso penalizan más que la rodadura pura

En los últimos meses hemos visto marcas y desarrolladores probar ruedas de 32” en prototipos de MTB rígidas o de dobles de carácter XC, con el objetivo de mejorar la estabilidad, la tracción y la capacidad para superar obstáculos. En teoría, el mayor diámetro proporciona un mejor ángulo de ataque y una rodadura más eficiente. Son los mismos argumentos con los que las ruedas de 29″ aplastaron a las 26″ hace unos años.

El problema llega cuando esa ganancia se cruza con los límites físicos y prácticos de una bicicleta de montaña moderna: el peso adicional, la necesidad de cuadros y horquillas específicos, y sobre todo, una aceleración más lenta que penaliza en recorridos donde los cambios de ritmo son constantes.

¿Tienen más sentido las ruedas de 32″ en gravel que en MTB?

El gravel: un escenario más adecuado para el concepto

En gravel, mantener la velocidad importa más que la agilidad o la aceleración

Si analizamos las características del gravel, las 32” podrían encajar mucho mejor. En esta modalidad, los recorridos suelen ser más largos, con menor desnivel acumulado y menos tramos que exijan aceleraciones explosivas. Lo que importa es mantener la velocidad de crucero con la menor pérdida de energía posible, y ahí es donde una rueda grande tiene sentido.

Además, las superficies de gravel son más previsibles que las del MTB. Esto permitiría aprovechar la mejora en inercia y rodadura sin sufrir las desventajas de agilidad que se percibirían en senderos estrechos o revirados.

Gravel

Peso y geometría: factores menos críticos en gravel

Quizás el futuro de las 32″ no esté en los senderos, sino en las pistas infinitas del gravel

El peso adicional de una rueda de 32” podría suponer un inconveniente en una bicicleta de MTB, donde cada gramo cuenta para escalar o cambiar de ritmo. En cambio, en el gravel, ese aumento de masa tendría un impacto mucho menor.

Las bicicletas de gravel modernas ya admiten ruedas de gran volumen y geometrías muy diversas, y un incremento en el diámetro de rueda podría compensarse con ajustes en vainas y ángulos sin comprometer tanto el comportamiento general.

¿Por qué no hemos visto prototipos de 32″ en gravel?

Las ruedas de 32” todavía son un experimento y no hay componentes disponibles de forma comercial. Mientras en MTB ya hay una lista decente de componentes para poder conseguir un montaje real con ruedas 32″ sin entrar en experimentos en su montaje (desde cubiertas y ruedas a horquillas), en gravel no conocemos ninguna cubierta de la modalidad que esté disponible en esa medida. Aun con todo, no sería la primera vez que una innovación nacida en el MTB acaba encontrando su lugar en otra disciplina.

El gravel, cada vez más abierto a la experimentación y a la búsqueda de rendimiento en largas distancias, podría ser otro terreno donde el concepto de rueda «gigante» encuentre su sitio real.

Te puede interesar