[Test] Mondraker F-Podium RR, creada para el nuevo XC

Usa un eje de pedalier a rosca, sumándose a la nueva tendencia de dejar de lado el PressFit

El cuadro incorpora todo lo que puedes esperar de un modelo de última generación. Anclaje del Trunnion para el amortiguador, está totalmente preparado para montar tija telescópica, guiado de cables interno, un trabajado protector de la vaina de la transmisión que reduce el ruido del golpeteo de la cadena o preparación para usar el sistema de suspensiones Fox Live Valve. Además se suma a la apuesta por el pedalier a rosca, una vuelta al pasado dejando de lado el Pressfit justo en la modalidad donde parecía tener más sentido por la reducción del peso en el cuadro que supone su uso. Pero en Mondraker han preferido la fiabilidad de los sistemas de pedalier a rosca, los de toda la vida. Además, tiene la línea de diseño propia de Mondraker, cumpliendo la premisa que se marcaron al idearla. Que incluso sin decoración la gente fuese capaz de reconocerla como una Mondraker. Las formas del basculante, el “nervio” de la dirección o cómo el tubo de sillín se abre para envolver el amortiguador son rasgos inequívocos de la marca.

En marcha con la Mondraker F-Podium

La unión de sensibilidad inicial y capacidad para afrontar grandes impactos es uno de los puntos fuertes de la suspensión trasera

En nuestro caso, un biker de unos 68 kg de peso, puse apunto la suspensión de la Mondraker F-Podium con 120 psi en el amortiguador para situarme entorno al 25% de SAG que recomienda la marca, un ajuste que resultó perfecto en marcha.

La Mondraker F-Podium se puede situar, sin problemas, como la perfecta abanderada del nuevo XC. Es una bicicleta diseñada para ser especialmente efectiva cuanto más complicado es el recorrido. Si hablamos de “calidad” de la suspensión trasera respecto a otras bicicletas de XC ésta está muy por encima de cualquier modelo monopivote del mercado. ¿Qué significa eso? Que con la Mondraker F-Podium tenemos una suspensión trasera capaz de tener una gran sensibilidad en la primera parte del recorrido al mismo tiempo que mantiene una enorme efectividad de pedaleo. Todo ello sin necesidad que el amortiguador asuma gran parte de la tarea de compensar las fuerzas que genera la pedalada.

Su geometría requiere cierta adaptación, especialmente en los tramos más lentos de subida

Vayamos por partes. Subiendo sacaremos más partido a la Mondraker F-Podium cuanto más abrupto sea el terreno. La rueda trasera dibuja el terreno como pocas mientras pedaleamos. La eficacia de pedaleo está entre las mejores de la categoría. Tanto que en incluso en tramos de subida lisos echas mano del bloqueo del amortiguador en muy pocas ocasiones. Por lo demás, el cuadro cuenta con una buena rigidez en todos los apartados, incluso en el lateral en la caja de pedalier, que podría ser su punto débil al encontrarse con la mini bieleta que enlaza el triángulo delantero y el basculante. Existen dobles con mayor rigidez en esa zona, pero la rigidez global de la Mondraker F-Podium le vale para aprobar este apartado sin problemas.

Para los que vengan de bicicletas con geometría más tradicional, para los bikers de XC más clásicos, necesitarán algo de tiempo para acostumbrarse a la geometría de la F-Podium en las subidas. Especialmente en las más lentas y reviradas, en las que el ángulo de dirección da la sensación de ser “perezoso” respecto a los verticales ángulos de dirección que se empleaban hasta no hace mucho, y que incluso se siguen empleando, en modelos rígidos. Es más una sensación que un reflejo real del rendimiento o velocidad a la que subimos. El ángulo de sillín tan vertical tan vertical cobra sentido en las subidas, situándonos en una posición ideal para pedalear.

Bajando la F-Podium puede situarse como una de las referencias del sector XC

Bajando las virtudes del sistema Zero salen a relucir al máximo. Y se unen a todo lo que puede ofrecer la geometría Forward. Tanto que sus 100 mm de recorrido parecen ser muchos más. Sí, 100 mm son 100 mm tanto aquí como en China, pero la forma en que cada sistema de suspensión los aprovecha puede marcar enormes diferencias. Esta es una sensación que no es trivial y que es uno de los pilares para todo lo que vendrá en el futuro en relación, y ya en este 2020 con la edición DC, partiendo de este mismo cuadro.

Un apartado en el que la bicicleta sobresale es cuando afrontamos tramos llanos muy bacheados, esas zonas en las que debemos mantenernos sentados en el sillín y pedalear sobre un terreno irregular. Aquí, la Mondraker F-Podium tiene un comportamiento ejemplar en cuanto al funcionamiento de su suspensión se refiere. Eficacia y comodidad total.

La suspensión trasera va tan bien que, en cierta medida, deja en evidencia a la delantera. Una horquilla de más recorrido y rigidez encajaría perfectamente

Si en los tramos de pedaleo la Mondraker F-Podium está entre las mejores dobles de XC, en las bajadas podríamos situarla, a día de hoy, como la nueva referencia dentro del segmento XC. Se logra unir una excelente sensibilidad inicial en la primera parte del recorrido (dentro de los cánones de una bici XC) con una parte intermedia del mismo extremadamente eficiente y aprovechable. Un viaje a lo que pueden ser las dobles de XC del futuro, en las que prime la capacidad de suspensión y feeling sobre el terreno frente a las cifras puras y duras como el peso. A pesar de mantener ese gran funcionamiento de toda la primera parte del recorrido la Mondraker F-Podium no es especialmente propicia a hacer topes de suspensión, incluso rodando con ese 25% de SAG que recomienda la marca.

La suspensión trasera funciona tan bien que deja en evidencia a la delantera. Aunque la horquilla Fox 32 SC es un referente en el XC, la Mondraker F-Podium te permite rodar a un ritmo en terreno exigente que lleva al límite la rigidez y absorción que esta horquilla ofrece. Sin duda un modelo de 120 mm (o alguno de los que están en camino de las grandes marcas) encajaría mucho mejor con el comportamiento de la Mondraker F-Podium.

Más seguridad y confianza en los tramos difíciles y más comodidad en todo tipo de terrenos. Los puntos fuertes de cara a la mayoría de bikers

El marketing dirá que la Mondraker F-Podium es la bicicleta nacida para adaptarse a las necesidades de los nuevos circuitos de XC de la Copa del Mundo. Pero pocos serán los usuarios que la lleven a competir a ese tipo de trazados. La realidad es que la Mondraker F-Podium es una de esas bicicletas capaces de reducir las diferencias de pilotaje entre bikers. Es decir, una bicicleta capaz de hacer más rápidos a los bikers que son menos hábiles gracias a un geometría que desborda seguridad y a una suspensión que trabaja de forma impresionante, ayudando a salvar errores de conducción. De cara los usuarios particulares es extremadamente divertida en terreno exigente y muy efectiva con el pedaleo.

Sólo 1 portabidón, espacio justo para la rueda trasera y el precio son los puntos donde podríamos criticar a un modelo muy conseguido en todos los apartados

A la hora de buscarle puntos negativos hay que entrar en modo muy “hater” para intentar sacarle los colores. Por un lado está lo evidente. Solo admite un porta bidón, algo importante para muchos usuarios. La entrada del cable del bloqueo del amortiguador al cable rompe la limpieza visual del cuadro y tiene una curva bastante marcada, pero es algo consecuencia de la posición en que se instala el amortiguador. Por otro lado, nos queda la duda de cómo afectará al sistema esos días de barro extremo. Si bien el amortiguador ha sido muy bien protegido la bieleta inferior queda bastante expuesta. Aunque probablemente este sea un mal menor dado que pocos serán los que rueden de forma habitual en condiciones tan extremas.

Por otro, está su precio, con 7.999€ para el modelo que hemos probado, un coste que será una barrera para muchos, con el primer modelo de F-Podium situado en los 4.199€ usando exactamente el mismo cuadro. También está disponible la opción de kit de cuadro suelto por 3.299€