El holandés Mathieu van der Poel está acaparando mucha atención en los últimos días. Tras su remontada histórica en Nove Mesto anunció que cambiaba su calendario para poder estar en la salida de Albstadt, pero no sin antes hacer dos etapas del Tour de Bélgica de carretera.
Dos de las cinco etapas de que consta la prueba. Muchos pensamos que se las tomaría como trámite, sin involucrarse especialmente en la prueba, pero no ha sido así.
Ayer, en la segunda etapa, el joven holandés se llevó la victoria de forma sorprendente al ser el más rápido de un pequeño grupo de escapados donde estaban buena parte de los favoritos de cara a la general. Batió al sprint, ni más ni menos, que a Philip Gilbert, que pasó a ser el nuevo líder de la carrera.
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Ganó el sprint tras una larga etapa que rozaba los 200km y que incluía varias ascensiones en su tramo final. Una escapada de 13 ciclistas logró abrir el hueco necesario para jugarse la victoria entre ellos. Gilbert, junto a Toni Martin, eran los corredores más destacados de la fuga, que también tenía al propio van der Poel y al también especialista en ciclocross Wout van Aert como parte de sus integrantes.
En el tramo final el pelotón casi se les echa encima, pero finalmente el triunfo iría para uno de los escapados. Van der Poel lanzó el sprint en solitario por la derecha de la carretera llevándose a su rueda a un Gilbert que no sería capaz de remontarle en un final espectacular.
Inicialmente estaba previsto que compitiese en todas las etapas del Tour de Bélgica, pero el propio corredor decidió que quería estar en la salida de Albstadt para probarse con los mejores riders del MTB saliendo desde la primera línea de la parrilla.
