Test de la nueva Kross Earth TE

La Kross Earth transmite músculo a nivel visual y todo en su cuadro es de carbono, bieleta incluida

La Kross Earth parte de un cuadro realizado completamente en carbono. Incluyendo la bieleta que activa el amortiguador. De sus formas destacan sus líneas angulares y el «músculo» que transmite la parte frontal de la bicicleta. Cuenta con un marcado slooping que es sinónimo de un bajo standover (la altura libre al suelo del final del tubo superior). En general todo el cuadro tiene unos «tubos» amplios que refuerzan la imagen visual de solidez.

Todo el cableado es interno, el cuadro es Boost y cuenta con un anclaje para poder instalar desviador delantero o un guía cadenas. En los modelos de serie se puede desmontar dejando el tubo con una estética más limpia. Respecto al basculante, no cuenta con punto de giro en la parte trasera, la fórmula más habitual en los sistemas de suspensión mono pivote para dobles de XC y bike-maraton. La zona de las punteras de la Kross Earth tiene un diseño curioso, con los tirantes que avanza hasta más atrás del eje de la rueda. En general, la Kross Earth está plagada de detalles de diseño que son diferenciadores.

Por la posición del amortiguador (que es de soporte Trunnion) el cable de bloqueo se guía en su primera parte de forma externa

La bieleta del sistema, que es de carbono, sujeta el amortiguador de anclaje Trunnion, una buena medida para aumentar la rigidez. Esa posición del amortiguador, a pesar de ser más lógica en busca de buena rigidez, obliga a que el cable del bloqueo trasero empiece guiado externamente para entrar por el cuadro a mitad del tubo diagonal. Esa curva que describe es mucho más suave que la que tienen los cuadros de diseño similar pero con el amortiguador en posición invertida. En ese tipo de diseño todo es más limpio, porque el cable entra directo al cuadro, pero la curva que describe el cable en el interior del cuadro es mucho más pronunciada. Estética contra rendimiento. En este caso Kross ha optado por garantizar un guiado del cable más natural y sacar el máximo partido al soporte Trunnion. También llaman la atención la dimensión de los puntos de giro de la bieleta, bastante generosos.

Por lo demás, el cuadro está preparado para guiado interno de tija telescópica y desviador delantero de tipo Side-Swing y han optado por un soporte flat-mount para la pinza trasera. Aunque en este caso no se le saca partido al no haber, todavía, versión flat-mount de la pinza Shimano XTR.

El peso anunciado para el cuadro Kross Earth, en talla S, es de 1.850 gramos (sin amortiguador).

La cinemática permite emplear presiones algo más bajas en el amortiguador, mejorando el funcionamiento de la suspensión

Con la suspensión abierta la Kross Earth hace gala de una buena eficacia de pedaleo. Sabiendo que los sistemas mono pivote suelen tener un comportamiento más activo con el pedaleo, Kross ha logrado sacar el máximo partido a la cinemática de sus sistemas de suspensión ESPS para que el equilibrio entre eficacia pedaleadora y movimiento de la suspensión sea ideal en casi todos los terrenos. La configuración del Leverage Ratio es bastante baja, lo que propicia el uso de presiones más bajas en el amortiguador, con todo lo que ello supone a nivel de eficiencia de funcionamiento del mismo.

Seguridad y confianza, los aspectos que más destacan del comportamiento de la Kross Earth en las bajadas

Bajando la geometría de la Kross Earth reluce por transmitir seguridad. En general, es la nueva tendencia en XC, con bicicletas más largas en su parte delantera que refuerzan la estabilidad y el control de la dirección. Unido a su ángulo de dirección, la Kross Earth brilla en terreno roto, rápido e inclinado, dentro de los cánones de uso del XC. En terreno más revirado, si vienes de una bicicleta más nerviosa, notarás cierta sensación de «pereza» en las curvas más lentas. Algo a lo que te adaptas rápidamente y que compensa, con creces, gracias a las ventajas en la mayoría de terrenos.

En cuanto a la suspensión, el sistemas es bastante lineal en todo su recorrido, ganando progresividad poco a poco a medida que nos «comemos» sus 100 mm de recorrido. Una elección de comportamiento buena para la mayoría de situaciones. En usos agresivos quizás echamos de menos un tramo final del recorrido más progresivo, aunque, como con la geometría, es un comportamiento muy acertado buscando cubrir el máximo de usos posibles.

Montaje de la Kross Earth TE

Un montaje sin experimentos en el modelo Kross Earth TE

Por nuestras manos ha pasado el mejor montaje de la marca. La Kross Earth TE llega con un grupo completo Shimano XTR de 1×12 en el que llama la atención la elección de las pinzas de freno de 4 pistones. Una decisión que consideramos muy acertada. El incremento de peso respecto a la versión de dos pistones es mínimo, mientras que el incremento de potencia y dosficicación de la frenada es bastante grande.

Del resto, todos los componentes están en su sitio. Las ruedas DT Swiss XRC 1200 Spline Carbon en modelo de llanta de 25mm son un seguro de rendimiento y calidad. Las suspensiones van a cargo de RockShox, algo poco habitual en modelos de gama alta de XC de serie. Mostraron un buen comportamiento a nivel de suavidad de acción y su mando remoto funcionó de forma suave durante todo el test.

Con un precio de 6.999€, la Kross Earth TE tiene todo lo necesario para poder competir en el peleado segmento de las dobles XC con argumentos para ganarse un trozo del pastel de esta disciplina.