Si tenemos que hablar de un grupo donde la relación calidad-precio destaque como primer atributo, en la gama Shimano nos tenemos que dirigir al Shimano SLX. Su última encarnación, la M7000, presenta un enorme cambio de imagen, asemejándose más que nunca al Shimano XT además de novedades en todos sus aspectos. Desde las bielas a los cambios, pasando por cassette, bujes y frenos de disco. Un Shimano SLX más potente que nunca.
El Shimano SLX M7000 es para todos
Si un grupo mantiene opciones para todos los usuarios es el SLX. Tendrá opción de 1×11, de 2×11 y de 3×10. Se cubren desde los bikers más actuales, los que apuestan por el monoplato, a los más clásicos, los que prefieren los 3 platos, una opción cada día más difícil de encontrar en el mercado.
Los platos Shimano estrenan nuevo dentado en su versión de 1×11 y 2×11. Es la Dynamic Chain Engagement, con diseño de dientes específico para cada plato. El objetivo es aumentar la retención de la cadena y la suavidad de cambios.
En dos platos podemos escoger entre 34-24, 36-26 o 38-28. Para monoplato se han creado platos de 30, 32 y 34 dientes. Los más comunes. Se mantienen los dos cassettes posibles para 11 piñones, o 11-40 (algo escaso para monoplato) o 11-42.
En tres platos los desarrollos escogidos son 40-30-22. No tendrás excusa para escoger tu transmisión Shimano SLX. Todas las opciones tienen cabida.
Se ha rediseñado la biela por completo. Ahora está pensada para lograr que el pedalier sea más estanco, aumentado la durabilidad del conjunto.
En cuanto a sus cassettes, el 11-40 se queda en los 467 gramos de peso. En tres platos, se ofrecen 3 cassettes diferentes: 11-32, 11-34 y 11-36. Todos los componentes de la transmisión con la tecnología Dyna-Sys en busca de cambios suaves.
El cambio trasero, de 10 o 11 velocidades, se activa con pulsadores Rapidfire Plus, conocidos por su ergonomía y la posibilidad de bajar piñones de 3 en 3, tanto con el dedo índice como con el pulgar. Llega la tecnología Shadow RD+, que permite una tensión excepcional del cambio para que la cadena no salte, con palanca para desactivarlo.
En cuanto al desviador delantero, opciones para todo tipo de montajes y tiros. Incluyendo la Side Swing que tan bien rinde.
Los bujes no son los componentes más conocidos de los grupos Shimano, pero los sigue manteniendo en su gama. Los del SLX estrenan sistema de acoplamiento de núcleo y cuerpo del buje, más rápido gracias a un dentado de 36 dientes que deja muy poco espacio «muerto». La durabilidad también es uno de los puntos fuertes de estos bujes. Pensado para aguantar el paso del tiempo. En cuanto a pesos, el delantero esa entre los 189 y 148 gramos dependiendo de la versión de eje, y los traseros entre los 384 y 357 gramos. Tienen opción Boost.
Durante mucho tiempo los frenos del grupo Shimano SLX han sido una referencia en cuanto a funcionamiento y precio. Eso no va a cambiar ahora y en conjunto con los nuevos discos (disponibles en 160, 180 o 203 mm) se espera que la frenada sea aún mejor.