Test Neumático de gravel Goodyear Connector

Tienen dos modelos de neumáticos de gravel, este es el más polivalente

El neumático de gravel Goodyear Connector ha llegado al mercado para ofrecer una cubierta todo terreno para este tipo de bicicletas. Goodyear ha creado una serie de tecnologías propias para dar vida a su gama de cubiertas y en la Goodyear Connector emplea buena parte de ellas. De entrada usan su concepto Tubeless Complete, que engloba la construcción específica de la carcasa pensando en una instalación simple y rápida del neumático y en evitar al máximo las pérdidas de presión de aire. En este modelo que ha pasado por nuestras manos emplean la construcción Ultimate, con un tipo de hilo más pequeño y una estructura que usa menos caucho, lo que la hace más flexible. Curiosamente Goodyear no da datos de los TPI de sus neumáticos, ni en la información del propio neumático ni en su página web. Aunque de ello hablaremos en las sensaciones.

Compuesto Dynamic:Silica4 y un único tamaño de 700-40

En cuanto a los compuestos de esta cubierta de gravel, la Goodyear Connector está disponible en dos versiones: Dynamic:Pace y Dynamic:Silica4. Esta segunda es la que usaban nuestras unidades. Podríamos decir que es el compuesto más orientado al rendimiento puro que tienen en su catálogo. Busca maximizar la capacidad de rodar y ofrecer un buen grip, incluso en condiciones mojadas. Entre las 6 opciones de compuesto que tiene Goodyear lo podríamos posicionar como en la franja de lo más blandos, aunque tampoco dan números exactos de dureza de la goma (algo que pocas marcas facilitan de forma directa).

Por lo que se refiere al dibujo, ya lo veis. Han seguido una táctica clara y conocida. Taqueado muy junto y bajo en la parte central para lograr una buena rodadura sin excesiva resistencia, y taqueado más separado y agresivo en los laterales para proporcionar agarre en el paso por curva.

Solo está disponible en una única medida de 700-40 (ETRTO de 40-622). El peso verificado de una de nuestras unidades era de 507 gramos.

ACTUALIZACIÓN: Goodyear nos ha comunicado que tienen disponible más medidas, aunque en el momento de publicación del artículo no estaban reflejadas en su web. Se trata de 700×35, 700×50 y 650×50.

En marcha con el neumático Goodyear Connector

Fácil de montar y con un ancho bien indicado si lo montamos en llanta de 19mm de ancho interno (la nuestra era de 23mm)

No sabemos si por la tecnología Tubeless Complete o por qué motivo exacto, pero montar el neumático Goodyear Connector fue rápido y desprovisto de esfuerzo. Entró en la llanta sin resistencia y se talonó a la primera sin problema. Para comprobar la capacidad de sellar el neumático de la tecnología Tubeless Complete lo inflamos sin ningún tipo de líquido en el interior y, tras dejarlo durante toda una noche, al día siguiente no había perdido presión. Así que, efectivamente, han hecho un gran trabajo en ese aspecto. A la hora de rodar de forma real le añadimos un poco de líquido sellante pensando en posibles pinchazos, aunque sabiendo que el neumático es totalmente sellado.

Lo montamos en una llanta de 23 mm de ancho interno que habíamos empleado en un test de gravel con neumáticos más nachos, quizás un pelín demasiado ancha para el balón de este neumático. En parte por ello nos dio una anchura real de 38 mm y no los 40 mm que anuncia y que seguramente tendríamos montándolo en una llanta de 19mm. De este modelo también llama la atención su lateral marrón, una estética clásica que ya está recuperada totalmente en nuestros días.

Buena capacidad para rodar y buena transición a los tacos laterales

En marcha el neumático Goodyear Connector cumple a la perfección lo que promete visualmente. Su rodar es rápido y con poca resistencia a la rodadura. La tracción que ofrece, sin ser su punto más destacado, la podríamos considerar correcta para un neumático de gravel, aunque las pistas con superficie más suelta no son su mejor terreno. En un uso más agresivo por senderos y tramos de curva nos sorprendió la buena transición entre el taqueado central y el lateral, sin duda un punto a favor, con unas reacciones suaves y predecibles. El agarre lateral también es bueno, aunque como pasa con todos los neumáticos de este tipo (especialmente por anchura y altura del taco) podemos encontrar el límite del agarre a la que hagamos un uso algo «bruto» por terreno más dado al MTB.

Curiosamente nos sorprendió el poco desgaste que tuvo en los kilómetros que lo usamos, aun no siendo el compuesto más duro de la marca. El hecho de estar disponible solo en una medida de ancho quizás pueda frenar a algunos usuarios y es, sin duda, el punto más desfavorable de Goodyear Connector. La carcasa dibuja bastante bien el terreno, con un feeling similar al que nos da un neumático de 120 TPI, aunque realmente no tengamos el dato de cuantos TPI tiene. En el tiempo de uso no sufrimos ningún pinchazo, a pesar de adentrarnos en algunos senderos más propias de MTB.

Fácil de montar, tubeless 100%, un dibujo polivalente, buena durabilidad, el look llamativo del lateral marrón y un comportamiento equilibrado lo sitúan como una gran opción para el gravel. Su precio es de 46€.

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