Los 4 años de Mathieu van der Poel en el MTB, todo lo que ha logrado

En su debut en el MTB ya ganó una etapa de la Afxentia de Chipre

El debut de Mathieu van der Poel en el mountain bike es relativamente reciente. El holandés no había competido nunca en MTB hasta el año 2016. Sí, hace poco más de 3 años no había tomado parte en ninguna prueba UCI de cross country. Su debut fue muy seguido y con su sello particular. Llegó en la prueba por etapas Afxentia, todo un clásico en el arranque de temporada. No era una casualidad debutar en esa carrera. Desde el inicio Mathieu van der Poel se puso como objetivo ganar una Copa del Mundo de XCO. Para ello necesitaba un mínimo de puntos UCI, ya no para tomar la salida en su primera carrera, que también, sino para tener una posición de salida mínimamente «decente» para estar en disposición de luchar por la victoria. La Afxentia es de categoría UCI SHC, la máxima en una prueba por etapas, como la Absa Cape Epic.

Solo necesitó 2 días de carrera para alzar los brazos. Fue 10º en la prólogo que abría la Afxentia para, en la primera etapa en línea, llevarse la victoria ante rivales de primera como Giger, Ferguson, Wawak, Braidot, Marotte o Kulhavy. Acabaría 4º en la general final.

Debutó en Cairns y compitió en Albstadt y Nove Mesto, pero con resultados discretos para lo que atesoraba

Antes del debutar en la Copa del Mundo, cosa que haría en la lejana carrera de Cairns, en Australia, compitió en una prueba de XCO de categoría C1 en Bélgica. Que ganó. Su único XCO antes de debutar en la Copa del Mundo. En Cairns, partiendo desde atrás pero con una parrilla reducida comparada a las pruebas de Copa del Mundo fuera de Europa. Acabaría 32º. Su siguiente parada era el Campeonato de Europa de XCO en Suecia, donde no acabaría. Ese mismo mes competía en Albstadt (34º) y Nove Mesto (91º). Estaba claro ese objetivo de ganar una Copa del Mundo le iba a llevar más trabajo de lo esperado. O como mínimo más esfuerzo del que acostumbraba a necesitar para lograr otros hitos que se había marcado y logrado en tiempo récord.

En 2017 estuvo muy cerca de ganar en Albstadt, pero tampoco lo lograría ese año

Llegaba 2017 y arrancaba el año de nuevo con una prueba por etapas. Esta vez la Belgian Mountainbike Challenge donde dominaría de principio a fin. En la primera prueba de la Copa del Mundo que disputada, en Nove Mesto, dejaba claro que esta vez sí venía a por todas a por ese triunfo que tanto ansiaba. En esa carrera protagonizó una de las remontadas más espectaculares de la historia de la Copa del Mundo. Desde la 90ª plaza de salida a la 8ª. Sí, Mathieu van der Poel ya olía la victoria. Solo necesitaba partir de una mejor posición de salida.

La siguiente semana era el turno de Albstadt. Y allí sí que rozó el triunfo. Se vivió el primer mano a mano entre él holandés y el rey del XCO, Nino Schurter. Una caída de MVDP mermaría sus opciones de victoria. Eso sí, con ese resultado todo indicaba que tenía esa victoria muy cerca. No sería así.

Logró ser 4º en el Mundial de bike-maraton en Singen

En línea con su excepcional polivalencia como corredor sorprendió a todos compitiendo en el Campeonato del Mundo de bike-maraton, celebrado en Singen, sobre un recorrido que favorecía mucho a sus características. De fuerza y muy rodador. Se le escapó el trío de cabeza que se jugaría las medallas pero ganaba el sprint por la 4ª plaza. Medalla de chocolate en su única participación en un mundial de bike-maraton.

Su retorno a la Copa del Mundo de XCO no fue el esperado. En una fase de la temporada donde arrastraba mucho cansancio y en unas condiciones que se han mostrado las peores para él (las carreras en altura) tomó la salida en Vallnord pero, cuando ya rodaba muy atrás, acabó abandonando. Remontaría el vuelo a la semana siguiente en Lenzerheide para ser 10º, pero en ese 2017 tampoco conseguiría estrenarse en la Copa del Mundo de XCO.

2018 estuvo siempre en el top-5, salvo el abandono de Nove Mesto

En 2018 disputaría 5 pruebas de la Copa del Mundo, igual que en este 2019. Era 4º en Stellenbosch y 3º en Albstadt para tener que abandonar con una mano dañada en Nove Mesto cuando intentaba seguir a Nino Schurter. Volvería con su habitual regularidad para ser 3º en Val di Sole, 3º en Vallnord y 4º en La Bresse. Se iba otra temporada y Mathieu van der Poel seguía sin ganar. Acostumbrado a lograr sus metas de forma rápida esta se le estaba atravesando. Pero además de talento, Mathieu van der Poel ha demostrado constancia y sacrificio hasta llegar a su excepcional 2019. Ese 2018 compitió poco fuera de la Copa del Mundo. Lo justo para ganar La Rioja Bike Race y el campeonato de Holanda de XCO. Mientras también deslumbraba en carretera ganando el nacional de fondo de forma impresionante, además de etapas en pruebas profesionales gracias a su excepcional final de carrera.

2019 ha sido su año. Tras una temporada de ciclocross espectacular ha volado en carretera y ha conseguido su objetivo de ganar una Copa del Mundo (3 veces…)

Y llegamos a 2019. El año de su explosión. Tras una temporada de ciclocross de ciencia ficción, ganando 32 de las 34 carreras que disputó, puso su vista en las clásicas de carretera. Empezó a enlazar victorias y resultados destacados hasta llegar a la exhibición marciana que le permitió ganar la Amstel Gold Race en su primera participación. Un objetivo que, podemos decir, le resultó bastante más fácil de alcanzar que su primera victoria en la Copa del Mundo de XCO.

En la prueba inaugural de Albstadt la batalla por seguir a Nino Schurter dejó fuera de juego a ambos y Mathias Fluckiger aprovechó para llevarse el triunfo por delante del holandés. Pero su gran día estaba cerca. Nove Mesto sería el escenario perfecto para que Mathieu van der Poel lograse su primera victoria en la Copa del Mundo. En un espectacular duelo con Nino Schurter, sentenciado en la última subida con uno de esos cambios de ritmo de otra liga que sólo MVDP es capaz de hacer. No sólo eso, era el primer fin de semana perfecto para él, puesto que también ganaría el Short Track. En esa modalidad no tiene rival, hasta el punto de haber ganado todos los que ha disputado en este 2019.

Val di Sole y Lenzerheide han sido testigo del mejor Mathieu van der Poel. La general podría ser suya

Se saltó Vallnord y apareció en Les Gets tras un largo stage de entrenamiento en altura en Livigno. Ganó el Short Track pero en el XCO no tuvo su ritmo habitual y finalizó 16º. Antes que llegasen las críticas el holandés lograba otro fin de semana perfecto en Val di Sole. Short Track y XCO de una tacada y su segunda victoria en cross country a la saca. Algo que repetiría en Lenzerheide, en casa de su rival más duro. De no ser por su ausencia en Vallnord sería el líder de la general. Pero no lo es. Y su temporada de MTB ha acabado a falta de ver si acudirá a la prueba de test del circuito olímpico en Tokio. A sus éxitos en la Copa del Mundo hay que sumar el campeonato de Europa que se llevó hace unas semanas.

Es evidente que el futuro de Mathieu van der Poel está lejos del MTB pero, como mínimo, disfrutemos de su talento durante 2020. El año en el que volveremos a verle centrado en el XCO con el objetivo de lograr el oro olímpico.

Estos son todos los resultados de Mathieu van der Poel en la Copa del Mundo de XCO: