Ischgl Ironbike Marathon, el día de sufrir de verdad
La Ischgl Ironbike, que cumplía 24 ediciones, era el plato fuerte. Sus números indican dureza, pero no toda la que tiene realmente
75,8 kilómetros y 3.700 metros de desnivel acumulado. Son número que impresionan pero que, a simple vista, podemos comparar con los de otras pruebas de bike-marathon exigentes de todo el mundo, como por ejemplo la HERO Dolomites que cubrimos hace unas semanas. Pero no, no se pueden comparar. Si miras con detalle el recorrido de la Ischgl Ironbike Marathon descubres que los primeros 27 kilómetros solo sirven para ascender 700 metros de desnivel. ¿Qué quiere decir eso? Pues que en menos de 50 km tendrás que hacer 3.000 metros de desnivel positivo. En dos largas y ultra inclinadas subidas. La primera de ellas es casi todo el recorrido de la Alpenhaus Trophy, después un pequeño descanso y unos últimos kilómetros de ascensión surrealistas, con pendientes imposibles para llegar a cerca de 3.000 metros de altura. Las vistas son excepcionales, pero el esfuerzo necesario para llegar aquí también lo es.
Las bajadas hacia meta, con el nuevo Flimjochtrail por medio, sirven para olvidar el sufrimiento de coronar sus dos colosos
Una larga bajada, al principio por sendero y después por una rapidísima pista, te llevan a Suiza, a la población de Samnaun (un pequeño paraíso con compras sin impuestos), donde arranca la siguiente subida, de nuevo con pendientes de locura para completar más de 1.000 metros ascendidos del tirón por la vía rápida. Eso sí, desde aquí prepárate porque la bajada es por el nuevo sendero del bike-park, el Flimjochtrail trail, repleto de flow y diversión. Una “breve” ascensión de 300 metros de desnivel será el último obstáculo de la carrera y nos llevará a otra larga bajada hasta Ischgl, también por bike-park en su inicio, con un tramo larguísimo y muy divertido, y por pista al final. Ser finisher de la Ischgl Ironbike Marathon no es cosa fácil. Además del recorrido, la altura a la que se rueda pasa factura a muchos. El recorrido es una combinación de subidas siempre por pista o asfalto y bajadas, o bien de bike-park o bien rapidísimas. Una prueba que no deja indiferente.
Dentro de la Ischgl UCI S2 Stage Race este día era clave. Tanto que sirvió para dar la vuelta a la general por completo. El hasta el momento sólido líder, Daniel Geismayr, tuvo que retirarse. Urs Huber puso la directa hacia el triunfo en la etapa, pero a su rueda se pegó el belga Fran Claes, que fue capaz de entrar muy cerca del suizo y llevarse la general final de la carrera.
La veteranísima Esther Süss ganaba la etapa y se llevaba la general.
