El vino y el mountain bike, una relación positiva

El mountain bike y el vino tienen una estrecha relación creada por una importante base de bikers y sus costumbres y respaldada por las importantes pruebas que usan las zonas vinícolas como terreno de juego de sus trazados.

Pero además, estudios recientes vinculan la ingesta moderada de vino a beneficios para nuestra salud.

Tanto es así que Dan Buettner, del National Geographic, mientras investigaba para su libro «Las zonas azules:lecciones para vivir más de la gente que ha vivido más» descubrió algunos datos sorprendentes sobre los hábitos de las personas que vivían más años. Entre ellos, que uno de los patrones más habituales entre las personas que vivían más de 100 años era que tomaban 1 o 2 vasos de vino tinto al día.

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¿Qué tiene de bueno el vino? A nivel nutricional se ha probado que consumir alcohol, o mejor dicho ethanol, reduce las posibilidades de sufrir un ataque al corazón. Siempre hablando de consumos moderados. El vino tinto, dentro de las diferentes variedades, es aún mejor puesto que colabora a tener unas arterias con mejor circulación gracias a su aporte de HDL (el llamado colesterol bueno). Pensando en el rendimiento puro y duro, unas arterias en mejor condición supone una sangre mejor oxigenada, y con ello una menor predisposición a la aparición de ácido láctico.

El vino tinto es rico en polifenoles, asociados a mejoras en las capacidades cognitivas, lo que nos permite estar más alerta y centrados. El resvaratrol, otra sustancia del vino tinto, es conocida por sus propiedades anti-inflamatorias.

Sí, muchas ventajas, pero siempre dentro de una dieta equilibrada y un consumo moderado puesto que el exceso tiene como consecuencia los efectos contrarios.

El vino y el MTB

Las zonas vinicolas y el vino son el eje entorno al que giran muchas pruebas de primer nivel. En el plano internacional la más famosa de ellas es la Absa Cape Epic, conocida por su enorme cantidad de kilómetros entre viñedos y por tener muchas llegadas y salidas desde emplazamientos vinicolas. En el pasado incluso se elaboró un vino creado con el líquido que salía de los bikers pisando la uva con sus bicicletas (protegidas con plástico) a su paso por la etapa prólogo. 1.200 bikers pasaron sobre ellas y dieron vida a una pequeña edición de vino creada en Meerendal Wine Estate.

En nuestro país la Skoda Gran Fondo Priorat también rueda completamente envuelta entre viñedos de una de las zonas vinicolas con mayor encanto. No sólo eso, en uno de los avituallamientos de la Gran Fondo los bikers podrán degustar un excelente vino de la región (recordar el tema de la moderación) a cargo de Tane Tresor del Priorat. Quedan pocas plazas para cubrir las 2.000 dispuestas por la organización para este año.

Y en un aspecto más recreacional, pocas son las meses de bikers que hacen sus paradas en las salidas de fin de semana en la que no se presenta una botella de vino. Así que, sabiendo de sus beneficios y ante las fechas que se aproximan, bebe vino sin remordimientos. Y sin olvidar que lo que cuenta es la moderación.