Más medidas en busca de limitar las ganancias aerodinámicas
La Unión Ciclista Internacional (UCI) ha dado un nuevo paso en su estrategia para reforzar la seguridad de los corredores y contener la escalada aerodinámica en el material. Entre las medidas aprobadas en su último Comité de Dirección, celebrado en Kigali, se incluyen nuevas especificaciones técnicas que afectarán directamente al diseño de los cascos utilizados en competición. Son medidas que afectan, únicamente, al ciclismo de carretera, ciclocross y pista. Se suman a las aprobadas respecto a las medidas de los manillares, ambas en la línea de limitar las posibilidades aerodinámicas que pueden exprimir los ciclistas, en esa cruzada de la UCI por buscar formas de reducir la velocidad a la que se rueda en competición. En ese mismo marco también se pondrá en marcha una prueba para limitar los desarrollos, una acción que ha llevado a SRAM a denunciar a la UCI.
Continúa tras los patrocinadores
Distinción clara entre contrarreloj y pruebas en pelotón
Medidas que, por ahora, solo se aplican a la carretera, ciclocross y pista
En junio de 2025 ya se había aprobado la simplificación de categorías de cascos, diferenciando únicamente entre los destinados a contrarreloj y los empleados en pruebas de salida en masa. Ahora, la UCI ha concretado las normas que regirán para estos últimos a partir de 1 de enero de 2026 en carretera y ciclocross, y de 1 de enero de 2027 en pista.
Requisitos para los cascos de salida en masa
Los nuevos cascos deberán cumplir con una serie de requisitos técnicos que buscan equilibrar seguridad y aerodinámica:
- Ventilación mínima obligatoria, para garantizar la refrigeración adecuada del ciclista.
- Prohibición de carcasas o accesorios que cubran u obstruyan los oídos, mejorando la percepción sonora y la seguridad en pelotón.
- Prohibición de viseras integradas o desmontables, con el objetivo de limitar las ventajas aerodinámicas excesivas.
