Ganar una prueba de Copa del Mundo y hacerlo con una bicicleta que no está en el catálogo – ni parece que estará – de la marca patrocinadora. Un caso de locura
La Copa del Mundo, junto con el campeonato del Mundo, es el mayor escaparate mundial que una marca de bicicletas tiene para mostrar modelos de XC. No hay nada más grande, con mejor cobertura y que llegue a tantos lugares a la vez gracias a la cobertura de Red Bull TV. Por ello, parece una locura que una marca que patrocina un equipo de Copa del Mundo deje pasar la oportunidad de lucir sus bicicletas en ese escenario. Más aún si se trata de ganar una carrera. Es más, de ganar una carrera élite masculina, algo que pocos aparte de Nino Schurter han logrado en los dos últimos años. Entonces, ¿por qué Mathias Fluckiger no compitió con la doble Thömus Lightrider que tiene la firma suiza?
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