SRAM será la primera gran marca en dar el paso y lanzar un sistema de frenado hidráulico para carretera con frenos de disco completamente ideados para este sector. Después de que la UCI legalizase los frenos de disco en bicicletas de ciclocross (en qué momento se les ocurrió ilegalizaros!), su salto a la carretera se veía como sólo cuestión de tiempo.
Para que ese paso se complete aún quedan muchas fases que pasar (cuadros, horquillas, cableados, discos, ruedas, llantas… todo una mini-revolución entorno a una nueva forma de frenar).
Ya se han filtrado las imágenes de lo que serán sus dos opciones de freno hidráulicas. Por un lado contarán con un sistema de frenado a llanta hidráulico. Un paso intermedio para que los usuarios puedan instalarse las manetas hidráulicas y usarlas con sus actuales llantas mientras los fabricantes adaptan y lanzan ruedas, cuadro y horquillas preparadas para los frenos de disco. Magura enseñó, hace unos días, una solución similar para las bicicletas de contrarreloj y triatlon Cervelo.
Por otro lado, la opción más interesante es la del freno de disco. Creado desde cero, su pinza es la máxima expresión del minimalismo. Se ofrecerán discos de 140 y 160mm, y su peso deberá ser muy reducido si quieren que este punto no sea un freno (valga la redundancia) para que los practicantes de ciclismo de carretera lo compren.
Todo esto podría suponer también futuras ventajas y aplicaciones para los grupos de mountain bike. Normalmente suele ser a la inversa, y son las nuevas funcionalidades lanzadas originalmente para mountain bike, las que pasan, adaptadas, al campo de la carretera. En la propia SRAM tenemos un ejemplo con la adopción este año de la piñonera SRAM Red que emplea el mismo sistema de construcción que la SRAM XX.
En este caso, los frenos SRAM Red de disco hidráulicos deberán solventar al 100% un tema que en la carretera será delicadisimo. Los posibles roces entre pastilla y disco. Los ciclistas de carretera nunca pensarán en adoptar este sistema si mientras suben uno de los interminables y solitarios puertos de los Alpes, el sonido del roce de la pastilla con el disco les acompaña en su esfuerzo. Será un punto en el que deberán hilar muy fino, y que actualmente, SRAM, es precisamente una de las marcas en las que esa problemática se da más (hasta el punto que marcas como Specialized han cambiado los frenos SRAM XX de sus bicicletas tope de gama por XTR, para evitar los problemas de desajustes en esos frenos).
Un avance en ese sentido tendría una rápida y excelente acogida en los grupos de mountain bike. Por otra parte, el lanzamiento de esa minimalista pinza de freno de disco por parte de SRAM ya ha hecho pensar a más de uno su uso para mountain bike, en bicicletas destinadas al XC más puro. Si son capaces de soportar el trabajo y estrés de una larga bajada por carretera al alta velocidad, podrán aguantar las intensas, pero normalmente cortas, frenadas de los circuitos de XC. A cambio, unos cuantos gramos menos respecto a las versiones de MTB.
Todo ello hablando del modelo filtrado de SRAM. Pero en breve será Shimano, con su Dura-Ace, la que se sumará a esta fiesta de los sistemas de freno hidráulicos para carretera. La ronda de presentaciones que la marca nipona ha preparado para dentro de unas semanas podría ser el primer paso para dar a conocer su futura solución en este aspecto.
En cualquier caso, SRAM, como ya hizo con los grupos de 2×10 velocidades en mountain bike, parece que será la primera en disponer de un grupo con frenos hidráulicos.
