Sam Gaze ante su gran oportunidad: «Voy a por la victoria, sueño en grande y creo en ello»

«He hecho muchos sacrificios para volver a encarrilar mi carrera después de una enfermedad mental»

Sam Gaze llega a los Juegos Olímpicos de París 2024 en el que podría ser el mejor momento de su carrera deportiva. El biker de Nueva Zelanda es un portento físico pero no esconde que ha tenido que superar problemas personales para mantenerse en la élite. “He hecho muchos sacrificios para volver a encarrilar mi carrera después de una enfermedad mental y contratiempos tras un grave accidente y una lesión en la cabeza en Sudáfrica en 2019. Me di cuenta de que necesitaba encontrar estabilidad en mi vida, lo cual era fundamental para que «el Sam en bicicleta» pudiese hacer feliz al «Sam fuera de bicicleta«.

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“Voy a ir allí para ganar. Mi deseo es llegar allí para alcanzar el escalón más alto.»

Si pensamos en nombres candidatos al otro olímpico no hay duda que, a pesar de haberse retirado del Tour de Francia por COVID, Tom Pidcock es el número uno. Pero al margen del inglés hay una serie de bikers con muchas opciones de medalla. Entre ellos está Sam Gaze que, probablemente, sea uno de los que más desapercibido pasa. Con un perfil bastante bajo en redes sociales, el de Nueva Zelanda puede estar ante una de sus grandes oportunidades de ser campeón olímpico. Tiene 28 años y parece que ha conseguido superar los problemas mentales y físicos que han mermado su rendimiento en el pasado.

“Voy a ir allí para ganar. Mi deseo es llegar allí para alcanzar el escalón más alto. Es una declaración mayúscula, pero sueño en grande y realmente creo en ello» explica el propio Gaze sin miedo a mostrar su auténtico objetivo.

¿Se pasará a la carretera en 2025?

«Combinar ambas disciplinas es un compromiso difícil y sólo unos pocos logran hacerlo con éxito.»

Eso sí, el propio Sam Gaze apunto a que puede estar cerca de iniciar un proceso de transición hacia el ciclismo de carretera profesional. De hecho, sus inicios estuvieron en la carretera. Su padre competía como ciclista amateur: «La primera vez que representé a Nueva Zelanda fgané la clasificación de la montaña en una carrera de carretera australiana. Pero como junior, me di cuenta de que el camino era mucho más difícil de recorrer en carretera y también me apasionaba el MTB, así que me pasé a la montaña.”

Sobre la posibilidad de compaginar MTB y carretera al máximo nivel, Gaze (como muchos otros) explica que no es algo sencillo: “No puedo negar que mi pasión por el ciclismo de ruta es realmente grande. Sin embargo, combinar ambas disciplinas es un compromiso difícil y sólo unos pocos logran hacerlo con éxito. Es mucho más fácil decirlo que hacerlo. Para ser honesto, la única similitud entre las dos disciplinas es que ambas tienen dos ruedas unidas al cuadro de la bicicleta. En una bicicleta de montaña, si tienes piernas, es muy fácil marcar la diferencia. Pero si tienes dos minutos malos, se acaba la historia. En carretera creo que hay muchos más peligros: hay caídas, otros ciclistas a los que prestar atención, elementos tácticos. Puedes esconderte durante 20 minutos porque las carreras son mucho más largas, pero la resistencia general de estos ciclistas es realmente increíble.»

Aunque deja claro que no ha tomado ninguna decisión concreta sobre su futuro: «No he tomado una decisión sobre lo que sucederá después de los Juegos Olímpicos.» Eso sí, tiene claro que tipo de ciclista de carretera sería: «Mi talla me lleva a las clásicas. La idea de arriesgarlo todo en Roubaix y Flandes me emociona mucho.»