RockShox Flight Attendant para XCO/XCM, ¿por qué el último en llegar?
Ya ha habido muchos intentos de usar electrónica en suspensiones de XC, pero ninguno como el Flight Attendant
Antes de entrar en detalles de cómo funciona el sistema Flight Attendant vale la pena poner un poco de contexto en qué supone la electrónica para las suspensiones de una MTB de XC.
Como siempre, tenéis el vídeo dividido en capítulos por si queréis ir directamente a saber cómo funcionan o a nuestras conclusiones sobre por qué creemos que son uno de los pasos más grandes en las mejoras para las bicis de XC en nuestro apartado de conclusiones.
Las suspensiones electrónicas no son nada nuevo en el MTB. Hace años que hemos visto diferentes intentos de suspensiones electrónicas buscando un hueco en el mercado pero, hasta ahora, en cross country, ninguna de ellas ha triunfado. En parte porque ofrecían pocas mejoras reales respecto al aumento en complejidad y precio. También tenían una integración mejorable en la bicicleta. El RockShox Flight Attendant viene a arreglar eso y os avanzamos que lo logra y con creces. La integración es sensacional, ni un cable a la vista, sin complicaciones en su instalación y con un funcionamiento que ha captado perfectamente lo que busca un biker que hace XCO o bike-maraton.
RockShox Flight Attendant
Las suspensiones electrónicas son una mejora más importante en XCO/XCM que en otras modalidades
El sistema de suspensiones electrónicas RockShox Flight Attendant ya existía desde hace tiempo, pero orientado a suspensiones de largo recorrido y modalidades gravity. Curiosamente, creemos que en esas modalidades la electrónica no es capaz de ofrecer un plus de funcionamiento que justifique su aumento de precio. Al fin y al cabo en enduro o incluso trail la prioridad son las bajadas y contar con una suspensión que funcione bien en las bajadas es más que suficiente para la mayoría. Pero en el XCO y bike-maraton la situación es muy diferente. Pongamos que una suspensión de MTB tiene que enfrentarse a 3 tipos de situaciones: bajadas, llanos y subidas. Si solo necesitas el máximo rendimiento para bajar es relativamente fácil tener una suspensión convencional adecuada para ello. Pero la cosa se complica cuando quieres tener una suspensión perfecta para bajar, para llanear y para subir. De ahí que un enorme número de bicis usen suspensiones de 3 posiciones, porque es la forma de adecuar su comportamiento a terrenos y esfuerzos muy diferentes. De la misma forma, la cinemática de un sistema de suspensión para XC, donde tiene que funcionar medianamente bien bajando, llaneando y subiendo, es más complicada de poner a punto que para una enduro, donde la prioridad es que vaya bien bajando y si subiendo no es súper eficiente nadie se volverá loco.
RockShox Flight Attendant
Las 3 posiciones de funcionamiento son habituales en las bicis XCO/XCM, olvidarte de escoger entre ellas es el objetivo final
Es evidente que la electrónica puede beneficiar mucho más a unas suspensiones para bici de XC que para una de enduro o trail. La confirmación de ello es que todas llevan mando remoto para controlar los modos de la suspensión desde el manillar, al contrario que en el resto de modalidades. Tener una suspensión electrónica que gestione esa elección de modo de funcionamiento en todo momento es un enorme cambio en cómo usamos una bici de XC. Entonces… si la suspensión electrónica tiene el potencial para mejorar tanto una bici de XC, ¿por qué ha sido la última en recibir el sistema Flight Attendant? Pues por dos motivos. En primer lugar, y aunque no suceda en España, a nivel global la modalidad de XC y bike-maraton es relativamente pequeña comparada con otras modalidades. Sí, nosotros somos un país muy racing con una mentalidad muy de alto rendimiento, pero no es así en todo el mundo y las marcas son globales. Por otro lado, es el sistema Flight Attendant más complejo de todos, con diferencia, y también supuso la llegada previa de las suspensiones RockShox con 3 posiciones de funcionamiento, unas suspensiones que eran el primer paso hacia este sistema electrónico.
RockShox Flight Attendant
¿Cómo funcionan las suspensiones RockShox Flight Attendant?
Se integran en el ecosistema AXS, adiós a 2 cables más
Vamos con el funcionamiento. La idea es simple y la tecnología que hay detrás es muy compleja. El objetivo final es tener unas suspensiones que escojan entre los tres modos de funcionamiento (Open, Pedal y Lock) en todo momento y de la forma más óptima posible, no sólo en función del terreno, sino también en función de nuestro esfuerzo, algo que es una novedad absoluta en el mundo del MTB.
Por un lado tenemos el ecosistema AXS de SRAM que permite que todos sus componentes se comuniquen entre ellos sin cables y que permite conectarse a su app SRAM AXS para realizar todo tipo de configuraciones y ajustes. Eso significa que no hay ni un cable en este sistema de suspensiones electrónicas.
RockShox Flight Attendant
Lo imprescindible son las 2 suspensiones y un sensor de pedaleo
Para que el Flight Attendant funcione lo imprescindible es tener la horquilla y el amortiguador con el sistema Flight Attendant y un sensor de pedaleo que SRAM vende y va en el eje de pedalier. Pero lo lógico es usarlo con su medidor de potencia puesto que es lo que permitirá sacarle todo el partido. Y si añadimos un segundo AXS Pod Controler, es decir, un segundo mando en el manillar, podremos interactuar con la suspensión con él y usar el modo Override, que podemos configurar como un bloqueo electrónico, del que hablaremos después.
RockShox Flight Attendant
Hay dos capas de información con las que trabaja, el terreno y nuestro esfuerzo
A nivel de funcionamiento el Flight Attendant toma la decisión de cómo ajustar la suspensión en función a dos tipos de información. Por un lado la información del terreno y de si estamos pedalean o no, que es el sistema que denominan Bias Adjust. Y por otra, añade una capa adicional de información en base a nuestro nivel de esfuerzo, capturado con el potenciómetro, que denominan Adaptive Ride Dynamics. El sistema puede funcionar sin la información del Adaptive Ride Dynamics, que es por lo cual tener un potenciómetro no es imprescindible para usar las suspensiones Flight Attendant, pero sí ayuda mucho a que su ajuste de la suspensión sea más preciso en cada situación.