Montaje pensado para el XC
En cuanto al montaje, Scott ha sabido vestir a la Scale RC 900 World Cup. Empezaremos por lo que menos nos ha gustado. La horquilla RockShox SID RL Air se ha mostrado dura en su funcionamiento y con una parte inicial del recorrido muy poco aprovechable. La RockShox SID World Cup que probamos hace unas semanas funcionaba de forma mucho mejor, más sensible y con mayor soporte en el tramo medio del recorrido. También valía mucho más que el modelo que equipa esta Scale. Eso sí, su mando de bloqueo remoto en el manillar es una delicia. Suave de usar y preciso.
Del grupo SRAM Eagle poco que decir. Su piñón de 50 dientes acerca el monoplato a muchos más usuarios. No sufrimos ningún problema con la nueva cadena de 12 velocidades en los más de 1.500km realizados.
La frenada, a cargo de frenos Shimano XTR, es suficientemente potente, en parte gracias a los propios discos Shimano. Los XTR vuelven a ser fiables dejando atrás los problemas del pasado más reciente. Eso sí, la competencia, también en frenos para XC, es mayor que nunca.
Un punto importante son sus ruedas. Syncros es la marca de componentes de Scott y suyas son las ruedas XR RC que monta. Los bujes son la parte más destacada. Rodar suave y sólidos, no obstante llevan el sello de DT Swiss. La llanta, de aluminio, es algo estrecha para las medidas actuales así que cuesta sacar partido a neumáticos de más de 2.2″. Vienen listas para montar como tubeless.
Potencia, manillar y tija son de Ritchey. Este modelo es de los pocos que se ha mantenido a salvo de la invasión Syncros, aunque creemos que poco durará en el futuro viendo la expansión de la gama Syncros. El sillín Syncros XR1.5 es peculiar por su tamaño. Tiene acabados de primera y sobre su funcionamiento te diremos que cada biker tiene su trasero… y que sobre preferencias en este sentido es complicado emitir un juicio.
A lo largo de la prueba no hemos tenido ningún tipo de crujido a nivel de caja de pedalier, algo destacable, puesto que los pedalieres de tipo PressFit suelen dar problemas en ese aspecto. No ha sido el caso.
Todo el equipamiento es equilibrado y adecuado para el uso al que va destinado una Scott Scale. Tan sólo pediríamos una horquilla más sensible, especialmente ahora que la geometría da confianza suficiente como para apurar un poco más cada bajada.
La Scott Scale se ha reinventado por completo, ha incorporado todas las novedades posibles, está llena de detalles de calidad y sus acabados son de primer nivel. En la Scott Scale todo ha cambiado para que todo siga igual. Todo ha cambiado para que la Scale siga siendo una de las bicicletas predilectas por los amantes de las rígidas.