La bici de Aleix Espargaró: peso, precio y test

El cuadro ha sido «lijado» hasta mostrar las fibras de carbono en su parte delantera

Bien, la base de este montaje es el cuadro de la S-Works Epic EVO. Sí, aquí se ha preferido poder tener el control de la suspensión en todo momento y en lugar de equipar el modelo con Brain ha optado por este modelo con mando de bloqueo remoto en el manillar. Es algo que también hace Jordan Sarrou, piloto oficial de Specialized Factory Racing y que compite con la S-Works Epic EVO. Hay algunas diferencias entre el cuadro S-Works Epic EVO y el S-Works Epic. De entrada, la más evidente es que el EVO cuenta con guiado para el bloqueo remoto del amortiguador. Ambos cuadros están realizados con carbono FACT 12m y son de los más ligeros del mercado. Por ejemplo, el cuadro S-Works Epic pesa 1,869 gramos con amortiguador incluído. ¿Cuánto pesa el de Aleix? Pues probablemente algo menos que eso puesto que el cuadro ha pasado por un proceso de personalización que incluye un lijado completo de la parte delantera, que ha quedado realmente espectacular, con las fibras de carbono al aire y todo el material que se ahorra con ello, aunque en la parte trasera sí va decorado con la llamativa trama de colores blanco y negro.

Usa una talla M con el sillín a 77 cm

A nivel técnico la principal diferencia es que el cuadro EVO emplea un basculante distinto, con unas vainas más largas para poder dar 110 mm de recorrido en lugar de los 100 mm de recorrido de la versión S-Works Epic.

Un detalle importante es que Aleix ha optado por una talla M, aunque está al límite de poder escoger también una L. Lleva el sillín a 77 cm de altura medido de caja de pedalier a arriba del sillín, y monta una potencia de 80 mm a pesar del buen reach que tiene el cuadro.

Amortiguador personalizado para esta S-Works Epic EVO… que es el mismo que usa Sarrou

Una diferencia destacada respecto a un modelo de serie la tenemos en el amortiguador. Esta S-Works Epic EVO ha sido montada por Raul Doctore, que puede que conozcáis porque brinda asistencia en competiciones y tiene su propia tienda. Además tiene una muy buena relación con SRAM, lo que le ha permitido crear un amortiguador con una configuración personalizada para esta bicicleta. Tras quitar el amortiguador Fox original montó un RockShox SID Luxe, pero el funcionamiento de serie no acabó de convencerle. Respecto a la versión de serie se ha cambiado la configuración interna para hacer que la progresividad sea mayor y empieza desde el mismo punto del SAG. Un comportamiento más acorde a lo que suele gustar en competición. Tanto que esa misma configuración es la que ha pasado a llevar Jordan Sarrou.

La personalización estética es uno de los puntos fuertes

El cuadro tiene el resto de características de un S-Works EVO, como el eje de pedalier a rosca, la patilla de cambio SRAM UDH y su potente protector de la vaina de la transmisión que evita que la cadena haga ruido al golpearla. Y el protector del paso de cables del basculante a la transmisión para que no entre suciedad en el cuadro.

No podemos dejar de hablar de la estética. Scolors se ha encargado de la personalización siguiendo las pautas marcadas por Aleix, que seguro que ya habéis visto que es muy fan de las combinaciones de blanco y negro. En la parte delantera se ha eliminado toda la pintura y ha quedado el carbono al aire, viéndose con detalle los diferentes tipos de capa en cada zona. Un acabado que, además de ser el más ligero posible, es impresionante. Tanto que nos gustaría ver una versión así, de serie, disponible para los usuarios. El entramado de blanco y negro ocupa la parte trasera de la bicicleta y encaja a la perfección con el mismo tipo de entramado en el manillar Gemini Propus.

Mando de cambio Zirbel con el Blipbox bajo el manillar Gemini Pröpus

Y entrando de lleno al montaje pasamos a otro de los pilares en la creación de esta S-Works Epic EVO. La integración y limpieza visual. De entrada el uso del mando de bloqueo remoto de Twist Lock deja dos cables a la vista que se podrían haber ahorrado con el Brain, pero poder controlar las suspensiones a mano era una prioridad. Eso sí, el sistema de puño giratorio es mucho más limpio visualmente que los bloqueos de palanca.

Pero el gran protagonismo de la integración y limpieza visual es la maneta de cambio. No, no la busquéis porque apenas se puede ver. En lugar de usar una maneta SRAM se emplea el sistema de Zirbel. Se trata de unos mandos súper minimalistas que se conectan al ecosistema del SRAM AXS a través de una centralita BlipBox. Es decir, ese pequeñísimo mando va conectado por cable a la centralita BlipBox. Cuando se usa un BlipBox mucha gente lo instala en el interior del cuadro, para que no se vea, pero eso hace imposible realizar ningún ajuste con él. Así que aquí, por practicidad, se ha situado en el exterior, bajo la potencia del manillar Gemini y pegada con cinta de doble cara. Al final, apenas queda a la vista en esa posición.

El pulsador de cambio es cómodo para bajar piñones pero no tanto para subir

Para pasar los cables del mando Zirbel al Blipbox sin que se vean sí que hay un trabajo artesanal. Se ha hecho un agujero minúsculo bajo la potencia para que el cable salga del Blipbox, y otro en la parte final del manillar para que el cable salga por ahí. Después circula por el interior del puño hasta el mando. Todo completamente escondido de la vista. Las puntas del manillar se han reforzado con un casquillo interno de aluminio para garantizar al 100% la seguridad. Un auténtico trabajazo que también ha llevado a cabo Raul Doctore.

Los mandos Zirbel se pueden configurar de muchísimas maneras. En este caso se usa un solo mando. Con él, girándolo hacia delante bajamos piñones, algo que se puede hacer de forma muy cómoda e intuitiva, tanto con el dedo pulgar como con el índice. Para subir piñones se empuja la mini palanca en sentido contrario, hacia atrás. Básicamente se hace con el dedo índice y ese gesto no es tan cómodo ni intuitivo. Requiere acostumbrarse y el mini pulsador no está tan a mano para hacer ese gesto como para hacer el gesto de bajar piñones. Si hacemos una pulsación, baja o sube un piñón, y si los dejamos pulsado, baja o sube piñones constantemente hasta que lo soltamos. Para nosotros, la configuración ideal hubiese sido un pulsador en un lado para bajar piñones y otro en el otro lado para subirlos. Aunque es cuestión de gustos, obviamente.

Plato ovalado en la MTB, pero usa plato redondo en carretera

El siguiente elemento que nos ha llamado la atención es el plato. No tiene nada del otro mundo, pero es un plato ovalado. Tampoco tiene nada del otro mundo eso. Lo curioso es que Aleix utiliza plato ovalado en MTB pero redondo en sus bicis de carretera. Él mismo nos lo explicó y en MTB siente que aprovecha mejor los golpes de pedal fuertes en tramos duros, donde es más complicado poder pedalear de forma redonda y donde se va más a pistonazos, por decirlo de alguna forma. En cualquier caso es llamativo poder pasar de una configuración de plato redondo a ovalado de un día a otro sin problemas.

La horquilla es una RockShox SID Ultimate SL de 100 mm de recorrido, lo que hace que el ángulo de dirección quede en la misma medida que en la S-Works Epic de 100 mm, en 67.5º.

Como persona enganchada a los números, es evidente que la S-Works Epic de Aleix Espargaró va equipada con medidor de potencia, un Quarq.

Ruedas Roval Control SL con neumáticos Maxxis Aspen de 2,25″ con protección

Por lo demás, al cambio trasero le ha añadido las roldanas cerámicas y sobredimensionadas de CeramicSpeed. Y hablando de eficiencia… Es sorprendente lo bien que giran las bielas, a pesar de que los rodamientos tienen ya bastantes horas de uso en este 2022, algo que también se aprecia en marcha con esa finura al pedalear tan adictiva.

En las ruedas se ha ido a una apuesta segura. Las Roval Control SL son muy muy ligeras y totalmente fiables. Van montadas con neumáticos Maxxis Aspen de 2,25” con protección y su dosis de líquido sellante. Ya os decimos que es un montaje real para competir sin problemas y sin experimentos arriesgados, y eso se percibe en la elección de las ruedas y neumáticos.

La tija de sillín es una ligerísima Darimo montada con un sillín que es un clásico en los montajes ligeros, el Tune Speedneedle. Según la carrera, Aleix cambia a tija telescópica o no.

Y el último punto, los frenos. También son un clásico de los montajes top. Unos Trickstuff Picola con maneta de carbono. Tienen un tacto excepcional y una potencia enorme. Eso sí, los discos, que también son Trickstuff, o las pastillas no ofrecen un buen mordiente y son ruidosos, algo que por suerte queda diluido en marcha gracias a la enorme potencia que tienen estos frenos.

Peso de la S-Works Epic EVO de Aleix Espargaró

9,1 kg con pedales, 2 portabidones, potenciómetro y soporte de GPS

Y vamos a uno de los datos más importantes en esta S-Works Epic EVO. El peso. Que fuese ligera era una de las prioridades de este montaje. Y vaya si lo han conseguido. La bicicleta completa, con pedales incluidos, soporte para el GPS, potenciómetro, líquido sellante y dos portabidones pesa 9,1 kg. Y la hemos pesado en dos básculas diferentes. Normalmente las bicis nuevas se pesan sin pedales ni portabidones, así que se los hemos desmontado para poder comparar en igualdad de condiciones y el peso en ese caso es de solo 8,7 kg. Unas cifras excelentes.

Precio de la bici de Aleix Espargaró

13.377€ sería el precio a día de hoy

¿Y el precio? ¿Cuánto cuesta la S-Works Epic EVO de Aleix? Obviamente ni él lo sabrá con exactitud. Os hemos hecho un cálculo aproximado, sumando los precios de cada componente, pero no es un cálculo para comparar con una bici de serie, puesto que montada de serie los componentes acaban teniendo un precio más económico que el precio de venta al público por separado. Por equilibrarlo un poco nos hemos basado en precios de los componentes en tiendas on-line y no en el precio oficial que da cada marca, en un intento de hacerlo lo más real posible.

Aquí veis la lista de precios y la cifra final sería que la S-Works Epic EVO de Aleix Espargaró estaría valorada en 13.377€. Ojo, que es un pastizal, pero no nos parece desorbitado con un montaje a la carta de este nivel, con un precio final cercano a bicis de serie con montajes y pesos alejados de la bici de Aleix. Faltaría el coste de montarla y la personalización del cuadro, pero sigue siendo una cifra relativamente razonable para una bici montada con lo mejor de lo mejor en casi todos los apartados.

• Cuadro S-Works EVO con amortiguador – 5.400€
• Horquilla RockShox SID SL Ultimate – 659€
• Mando TwistLoc – 97€
• Manillar Gemini Pröpus – 650€
• Ruedas Roval SL – 2.000€
• Frenos Trickstuff Picola Carbon – 755€
• Discos de freno Trickstuff – 90€
• Blipbox AXS – 350€
• Pulsador Zirbel – 120€
• Puños Ritchey espuma – 10€
• Sillín Tune Speedneedle – 204€
• Tija Darimo T1 Loop – 299€
• Cambio SRAM XX1 Eagle AXS – 595€
• Kit roldanas CeramicSpeed – 529€
• Cassette SRAM XX1 Eagle AXS – 390€
• Cadena SRAM XX1 Eagle – 79€
• Bielas con potenciometro quarq – 890€
• Pedales Look X-Track Carbon Ti – 170€
• Neumáticos Aspen 2,25” – 90€

En marcha con la S-Works Epic EVO de Aleix Espargaró

Ha conseguido una doble que sube excepcionalmente bien, el peso tan bajo en una bici tan fiable es poco habitual

Y hemos tenido la suerte de probarla. Siendo una talla M solo hemos tenido que poner el sillín a nuestra medida y nos hemos encontrado en una posición muy familiar, perfecta prácticamente para competir. Lo primero que transmite la S-Works Epic EVO de Aleix es rapidez. Acelera de forma impresionante y realmente, entre el peso, la rigidez y la posición ha conseguido una doble que transmite ser muy escaladora. Bajando nos encontramos que el no tener tija telescópica es un factor limitante en muchas situaciones, especialmente si estamos acostumbrados a ella. La suspensión trasera tiene un tacto más racing de lo que solemos encontrar en bicis de serie y aunque la primera parte es bastante suave, empieza a endurecerse rápidamente. El mando de RockShox no nos acaba de convencer, aunque ya tienen una nueva versión en el mercado que promete ser más ergonómica. Los frenos son potentes, pero los discos y pastillas les restan efectividad. Eso sí, el tacto de la maneta es sensacional. Los neumáticos son rápidos pero fiables, con carcasa reforzada y se percibe con facilidad que todo en la transmisión rueda muy muy fino.

Estética, ligereza e integración son de primera

En definitiva, si Aleix tenía como objetivo lograr una bicicleta ligerísima, con una estética única y fiable, lo ha conseguido. Realmente está lista para competir en cualquier carrera sin ningún miedo a problemas de fiabilidad. De hecho es un montaje de gama alta con algunos detalles exclusivos, pero sin componentes especialmente arriesgados. Su bajo peso es adictivo y en combinación con la buena rigidez de todos los componentes la convierten en una excelente escaladora, incluso en terreno muy técnico, donde la suspensión trasera tiene un comportamiento ideal para un uso racing. Solo nos queda la duda razonable sobre si se podría mejorar la experiencia cambiando a la hora de subir piñones con dos mandos Zirbel separados y la ergonomía, no muy lograda, del mando de bloqueo remoto RockShox, que ahora ya han actualizado con un nuevo modelo.

Sobre la estética, pues ya lo veis, es fácil identificarla y la combinación de blanco y negro con la parte delantera con el carbono al aire es espectacular, tanto de lejos como de cerca. Sin duda, todo un sueño de bicicleta.