Hay muchos factores que influyen en la correcta elección de la presión de las ruedas
Empezaremos por la mala noticia. No hay un número mágico indique la presión que tienes que llevar. Cada biker debe saber su presión de base y, a partir de ese número, adaptarla a las diferentes circunstancias que nos podemos encontrar en una salida de mountain bike. Hay una serie de variables que influyen a la hora de considerar cual es nuestra presión de neumáticos ideal. Son estos 6 puntos que hemos ordenado por orden de prioridad.
1 . Nuestro peso
La presión de partida o recomendada va en función del peso del ciclista
La misma presión tendrá resultados diferentes en función de nuestro peso. Cuanto mayor sea nuestro peso más tendremos que aumentar la presión en los neumáticos para evitar pinchazos, destalonamientos o golpes en la llanta. Por ejemplo, un biker de 50 kg puede sentir que una presión de 1,8 bar en un neumático de 2,2″ es excesivamente dura. Sin embargo, un rider de 100 kg con ese mismo neumático de 2,2″ a 1,8 bar sentirá que el neumático está muy blando y tendrá un gran riesgo de golpear la llanta con los obstáculos.
2. El volumen o balón del neumático
No es lo mismo un neumático de 2,1″ que uno de 2,4″. A mayor tamaño menor presión podemos llevar
El volumen (o balón) del neumático va de la mano de la presión. Es decir, una misma presión ofrecerá comportamientos diferentes según el volumen del neumático. Una cubierta de 2,2″ a 1,8 bar para un biker de 70 kg puede ser correcta. Sin embargo, esa misma presión en un neumático de 2,6″, para ese mismo biker, resultará muy dura dado el mayor volumen del neumático y la mayor capacidad del mismo de rodar a baja presión.
3. Tipo de terreno
El terreno por el que rodamos es un factor clave a la hora de escoger la presión
¿Cómo es, mayoritariamente, el terreno por el que vas a circular? Si el terreno es principalmente pedregoso deberemos aumentar la presión para evitar golpes del neumático con la llanta y daños en los laterales del neumático. En cambio, si el terreno es en su mayoría liso y de flow, podremos bajar la presión por debajo de nuestra presión base para lograr un extra de agarre y grip.
4. Construcción del neumático
Cuanto más sólida es una carcasa de neumático más podemos bajar la presión sabiendo que se deformará menos en apoyos fuertes
La carcasa de nuestros neumáticos marcará nuestra elección de presión. Por norma general, los neumáticos ligeros tienen unas paredes más delgadas que tienen mayor tendencia a deformarse en apoyos fuertes. Por ello obligan a llevar una presión un poco más elevada. Los carcasas con un TPI más alto son más flexibles, y por ello también requieren más presión para mantener la forma correcta. Las protecciones laterales antipinchazos de los neumáticos también ayudan a un carcasa más sólida y a poder reducir la presión.
5. Estilo de conducción
El estilo de conducción de cada biker también influye en cuál es su presión ideal
Nuestra forma de «pilotar» nuestra mountain bike es vital a la hora de escoger la presión de neumáticos adecuada. Debemos ser sinceros con nosotros en este sentido. Un biker más agresivo, que realiza apoyos fuertes en curvas, saltos y trazadas más directas tendrá que aumentar la presión para evitar que destalone el neumático, que haya pérdidas de presión o golpes contra la llanta. Si tienes un estilo más fino, escogiendo las líneas más limpias de forma habitual, podrás bajar la presión un poco.
6. Ancho de llanta
Las llantas anchas permiten conseguir una forma óptima del neumático, pero deben ir en relación al ancho del neumático
Uno de los últimos factores a considerar desde hace un tiempo. La irrupción de llantas más anchas y una mayor variedad de anchuras ha permitido hilar más fino en la presión que usamos en nuestros neumáticos. Las llantas anchas facilitan bajar la presión gracias a la forma que dan al neumático. Pero atención, no vale lo de «cuanto más ancha mejor». Hay unos anchos máximos recomendados para cada medida de balón de neumáticos. Hace unas semanas escribimos sobre las llantas anchas.