Fue a USA como parte de su planificación para rehabilitar por completo la rodilla que le genera dolor
Tom Pidcock está teniendo una pretemporada movida. Ha pasado unos días en Los Ángeles, USA, con el único objetivo de recuperarse por completo de los problemas de rodilla que viene arrastrando. Allí ha llevado a cabo un programa de rehabilitación intensivo y los primeros kilómetros en bicicleta pensando ya en la temporada 2023. No es una lesión grave pero si una molestia física que viene arrastrando desde hace un tiempo y que ha condicionado su preparación en algunos momentos. El inglés ha acudido desde Los Ángeles a París para asistir a la presentación del recorrido del Tour de Francia del próximo año.
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«No es un problema que baje mi rendimiento. Donde más lo he notado es en los sprints.»
Desde hace cerca de 2 años que Tom Pidcock sufre problemas en una de sus rodillas y solventarlos se ha convertido en la prioridad de esta pretemporada. Eso supone que su ya corto programa de ciclocross va a ser aún más reducido o, como mínimo, va a arrancar más tarde. El actual campeón del mundo de la modalidad ha decidido posponer su regreso al barro. Ni siquiera tiene fecha para debutar. «Aún no he hecho un calendario. Creo que empezaré en 3 semanas, pero aún no he hablado de ello. Mi entrenador está con COVID, así que no hemos tenido esa conversación aún.»
Sobre ese problema de rodilla explica que «no es un problema que baje mi rendimiento. Donde más lo he notado es en los sprints. No puedo sprintar entrenando porque me duele, así que este año mi sprint no ha sido tan bueno como el año pasado. Eso es un problema real.»
