Un momento clave de la carrera de MTB masculina de los Juegos Olímpicos de Tokio ha sido la caída de Mathieu van der Poel que ha acabado con sus opciones de medalla y, finalmente, con su abandono. Es evidente en las imágenes que el neerlandés no afronta el obstáculo como se debería, sin lanzar la bicicleta para salvar el gran drop que tenía delante y empuntando totalmente. Mathieu van der Poel, sin ser un especialista en el MTB, ha demostrado tener técnica suficiente para superar ese tipo de obstáculos sin problemas. ¿Qué ha pasado?
Continúa tras los patrocinadores
«Podría hacer el circuito con los ojos cerrados pero no sabía que iban a quitar esta rampa el día de la carrera.»
Tan pronto como se ha producido la caída de Mathieu van der Poel en circunstancias, como mínimo, extrañas, han empezado a aparecer mensajes desde el entorno de la prensa de Países Bajos y de la propia selección relativos a la rampa que había instalada en el drop durante los entrenamientos y que hacía que no fuese necesario saltar para superar el obstáculo. Rápidamente se ha extendido el mensaje de que Mathieu van der Poel no sabía que esa rampa no iba a estar en carrera. Lo que parecía un rumor ha acabado confirmado por el propio corredor vía redes sociales.
«La gente cercana a mi sabe lo duro que he trabajado por esto y lo mucho que lo quería. Podría hacer el circuito con los ojos cerrados pero no sabía que iban a quitar esta rampa el día de la carrera.»