Kaitlin Armstrong declarada culpable del asesinato de Moriah Wilson

Su muerte impacto la escena gravel de USA

Parece que la enrevesada historia alrededor de la muerte de Moriah Wilson está dando sus últimos capítulos. Tras 2 intentos de fuga ayer se celebró el juicio contra la única acusada de su asesinado. Kaitlin Armstrong, de 35 años, y acusada de ser la persona que disparó mortalmente a la popular ciclista de gravel. En un juicio con jurado popular celebrado en Austin fue declarada culpable.

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Ganó la Unbound gravel en 2021

La historia del asesinato de Moriah Wilson estuvo plagada de sucesos y envuelta en una historia digna de película. En ella se vieron involucrados la propia Kaitlin Armstrong y el que fue pareja de ambas, Colin Strickland.

Como os explicamos en su día, la popular corredora de gravel (ganó la Unbound gravel en 2021) y MTB fue encontrada muerta poco antes de la celebración de la carrera Gravel Locos, el pasado 11 de mayo de 2022.

Tras las primeras investigaciones se cursó una orden de arresto para Armstrong, que escapó del país usando el pasaporte de su hermana para volar a Costa Rica. 43 días después fue detenida en ese país.

Había ADN de Armstrong en la escena del crimen, las balas encontradas correspondían a las de su pistola y se grabó a su coche saliendo de la escena del crimen minutos después de la muerte de Wilson

Colin Strickland, pareja de Armstrong, fue la última persona en ver con vida a Wilson. Strickland había mantenido una relación con Wilson durante un periodo de ruptura entre él y Armstrong en 2021. Hubo varios testimonios que confirmaron que Armstrong sentía celos respecto a Wilson. También hubieron testimonios que sugirieron que Armstrong usaba la cuenta de Strava de Wilson para controlar su ubicación.

Un elemento clave en la investigación fue una cámara de seguridad de un vecino que captó las imágenes del Jeep de Armstrong en la escena del crimen. El único argumento usado por la defensa era que en esas imágenes no se podía comprobar que la propia Armstrong estaba presente.

En la propia escena del crimen se encontró ADN de Armstrong y las balas encajaban con la pistola que tenía la propia Armstrong.

Evidencias extremadamente claras que el fiscal apuntó: «Se disparó su pistola y había ADN en la escena del crimen. Nadie más en el mundo se fue de la escena del crimen en su Jeep 2 minutos después del asesinato.»

Ahora se enfrenta a una pena de hasta 99 años de prisión que se podría sumar a otra condena de 20 años por intentar huir de la justicia en su intento de escapada hace unas semanas.