Ha sido el recorrido más exigente de LaTramun, que sigue fiel a los senderos infinitos en un trazado que deja huella
Que LaTramun es una carrera diferente es algo de sobra conocido. La “singletack marathon” ha vuelto a hacer gala de su eslogan con un recorrido que ha dado una pequeña vuelta de rosca más, tanto en flow como en dureza. Basándose en el trazado estrenado en 2020, la organización ha introducido nuevos senderos y una dura ascensión adicional que a buen seguro recordarán todos los participantes. El terreno de juego de esta 23ª edición han sido 77 km con 2.400 metros de desnivel positivo y… casi 3.000 metros de desnivel negativo. Sin barro, y con un grip ideal, los participantes han podido gozar de una de las ediciones con los senderos en mejor condición de los últimos años. Una vez más, prácticamente el 90% del trazado discurría por singletracks. De todo tipo, desde flow a rock gardens naturales contando con todos los ingredientes que convierten al MTB en un deporte único.
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