La Brasil Ride ha vuelto a vivir otra jornada épica en su 5º día de competición. 93Km por delante que iban a atragantarse a más de uno. De nuevo se ha producido un cambio de líder y la general se ha vuelto a re-estructurar.
La etapa se iniciaba con un suceso que iba a ser premonitorio de la suerte que iba a correr el equipo Superior-Brentjens que partía como líder. A falta de 1 minuto para la salida, Jiri Novak veía como su rueda empezaba a perder aire. Por suerte el líquido sellaba y podían inflar en el último momento. Era el inicio de su particular via crucis.
Los primeros 16km, en ascenso y por pistas arenosas, servían para comprobar que Sauser y Yamamoto iban a por todas de nuevo. En el km 10, Novak volvía a pinchar, y los líderes se descolgaban.
Se entraba en una larguisima zona de sendero muy técnico y exigente. Una trialera de 15km repleta de piedras gigantes, arena y subidas y bajadas comprometidas. Sauser y Yamamoto se la jugaban desde el inicio y se destacaban del resto junto con el equipo de Avancini y Trezza de Paiva.
Los riesgos asumidos por el equipo Specialized en una zona tan complicada acabarían en dos pinchazos que también suponían el inicio de un pequeño calvario para la pareja suizo-japonesa, puesto que aún volverían a pinchar una tercera vez.
Los que no fallaban eran Avancini y Trezza de Paiva, que se marchaban en solitario. Tras ellos, el equipo formado por Hugo Prado Neto y Lukas Kaufmann. Y detrás se formaba un grupo con el equipo de Paulissen y Pallhuber junto al team ESMTB.com de Ventura y Sagues. Ambos parecían reducir distancias respecto a los 2º clasificados de la etapa, mientras que los líderes aumentaban diferencias.
Pero la rotura de un pedal en la bicicleta de Ramón Sagues hacía que este dúo de equipo también se rompiese. Con 30km de pistas arenosas y viento de cara, la carrera se volvía en una lucha individual de cada equipo por ir lo más rápido posible.
Las posiciones no se alteraban en esa zona. A falta de clasificaciones oficiales, los ganadores de la etapa, Avancini y de Paiva, pasarían a ser los nuevos líderes, seguidos a poco tiempo por el equipo ESMTB.com, que se mantiene en la 2ª plaza que logró en la 2ª etapa.
Crónica equipo ESMTB.com – Ismael Ventura y Ramón Sagues.
Ya estamos en la dinámica de la locura. Hoy el día ha tenido de todo. Desde una trialera de 15km repleta de rock gardens que nada tienen que envidiar al más difícil de la Copa del Mundo, a pistas gigantes de arena, con viento de cara, que era una especie de prueba para la mente humana.
Por nuestra parte hemos tenido mala suerte de nuevo. Aunque en realidad, somos unos afortunados. Vinimos aquí con una bolsa con ropa y una bicicleta para descubrir una nueva carrera e intentar hacer de los 10 primeros en una prueba UCI como esta. Sin asistencia, sin masajista, sin hoteles, sin mecánicos. Y ahora llevamos 4 días en la 2ª posición de la general. Cada día rodamos con gente del máximo nivel mundial, como los Specialized, Avancini (que ha pelado a buena parte de los europeos en carreras de XC este año), Paulissen, Becking, o un montón de corredores que siempre ves en los medios o por el Facebook.
Así que, dentro de nuestra mala suerte, no dejamos de estar flipando. El problema de hoy ha sido una rotura de pedal en la bici de Ramón. Podría haber sido el fin. Y no lo ha sido, así que es para estar contentos. Con los líderes con problemas, parecía que podríamos incluso ponernos líderes. Pero el maillot amarillo es muy caro. Si hasta hemos tirado de la prueba en algún momento.
Me ha sorprendido como los corredores más buenos bajan como locos por senderos inhumanos sin conocérselo, estando en mitad de la nada y con el puesto de asistencia a 30km. Realmente podríamos bajar más rápido de lo que bajamos, pero claramente no es lo más sensato si quieres intentar conservar la bici. Ni intentando conservala te puedes librar de problemas, imagina bajando a mil sobre piedras tamaño pelota de baloncesto. Así hemos visto a los Superior pinchar, a Sauser y Yamamoto multi pinchar, caídas, y mil problemas.
Cuando íbamos genialmente colocados con Paulissen y Pallhuber camino de dar caza a los segundos hemos tenido que parar a mirar de arreglar lo del pedal en una zona técnica. Nos hemos quedado solos para hacer 40km de pistas con viento de cara y arena. ¿por qué siempre que vas solo hace viento de cara? ¿y por qué las pistas tienen tanta arena? La jornada de hoy era muy destroyer. Incluso el último puerto para llegar a meta, por asfalto, era matador.
Organizadores del mundo, no escojáis como final de etapa para 4 jornadas un pueblo que está arriba de un puerto. Porque eso querrá decir que cuando más muerto estás te toca la subida más dura. Así llevamos 4 días.
Pero en definitiva, dentro de nuestro mundo de mala suerte, quejas, dolores de todas las partes del cuerpo, horas y horas de intentar reconstruir las bicis tras las etapas, buscarnos la vida para masajes y llegar como cadáveres a meta cada día, somos unos afortunados. O así me siento cuando veo la clasificación y veo los medios que tenemos.
¿Qué quiere decir eso? Que quedan dos días, nos acechan los lobos en la general, pero tendrán que sudar mucho para comernos! 🙂
Mañana se preveé una jornada de muerte y destrucción con 140km de recorrido. Desearnos suerte!
