Su primera gran victoria en años
Aaron Gwin ha vuelto. El cinco veces ganador del título general de la Copa del Mundo de descenso ha logrado su primera victoria de prestigio en años al imponerse en la segunda ronda del Monster Energy Pro Downhill Series, disputada este fin de semana en Mountain Creek Resort, Nueva Jersey. Un triunfo que podría marcar el inicio de un nuevo capítulo en la carrera del que fue, durante buena parte de la última década, el rey indiscutible del descenso.
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Gwin es uno de los mayores nombres en la historia del DH
Entre 2011 y 2017, Gwin dominó el DH mundial con una autoridad aplastante. Ganó cinco generales de la Copa del Mundo, firmó un total de 20 victorias individuales —incluida su célebre bajada sin cadena en Leogang— y llegó a colocarse como el segundo corredor con más triunfos en la historia de la disciplina, solo por detrás de Greg Minnaar. Sin embargo, desde su victoria en la primera ronda de la Copa del Mundo de 2018, su carrera se vio frenada en seco por una serie de lesiones y caídas que le apartaron de los podios y sembraron dudas sobre su futuro en la élite.
Pero Gwin nunca se rindió. En lugar de dar un paso atrás, decidió implicarse aún más en el deporte que lo llevó a la cima. En los últimos años se ha convertido en copropietario de Crestline Bikes, una marca emergente que está apostando por el DH de competición, y ha formado su propio equipo, el Gwin Racing, desde el que sigue compitiendo mientras desarrolla nuevas plataformas junto a su socio técnico.
