Su llegada al Ineos-Grenadiers planteaba dudas sobre si podría seguir corriendo en otras modalidades que no fuesen la carretera
La relación de Tom Pidcock con el MTB es tan corta como intensa. Corta porque podríamos decir que arrancó a mediados de este 2020, e intensa porque se ha llevado las dos pruebas de la Copa del Mundo sub-23 que ha disputado y el Campeonato del mundo de su categoría. Además del mundial de e-bikes. El inglés compite en su propia estructura con total libertad. Pero eso se acabará en 2021, cuando pasará a la plantilla del equipo de carretara Ineos-Grenadiers, el equipo rey del ciclismo de carretera conocido por su enorme control en todos los aspectos de la carrera deportiva de sus integrantes. Por ello, era normal plantear dudas sobre qué pasaría con la carrera de Tom Pidcock como corredor de MTB.
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Su 2021: «Primero la temporada de ciclocross, después las clásicas de las Ardenas y la prueba de mountain bike de los Juegos Olímpicos de Tokio»
Tom Pidcock ha vuelto a ponerse un dorsal. Esta vez para arrancar su temporada de ciclocross. Ya lleva dos carreras aunque probablemente no con el resultado que esperaba. Fue 17º en la Copa del Mundo de Tabor y 9º en el Superprestigio de Boom celebrado el pasado día 6. El inglés es el actual subcampeón del mundo élite de la modalidad, resultado logrado siendo aún sub-23. Sigue teniendo en mente conseguir el maillot arco iris en categoría absoluta en esta disciplina.
Se trata de un ciclista que podríamos decir que es un calco de Mathieu van der Poel en muchos aspectos. Capaz de brillar en carretera, ciclocross y MTB. Solo tiene 21 años y ya ha atraído las miradas de buen parte del mundillo ciclista. Ahora ha dejado claro sus objetivos de cara a los próximos meses, y el MTB sigue formando parte de su agenda. «Primero la temporada de ciclocross, después las clásicas de las Ardenas y la prueba de mountain bike de los Juegos Olímpicos de Tokio» ha explicado el nuevo integrante del Ineos-Grenadiers.