Ruzafa en lugar de Coloma, y posteriormente Coloma en lugar de Ruzafa.
Esto podría definirse como el chiste de mal gusto del año.
Este es el regalo que le han hecho los responsables de la selección olímpica de mountainbike a nuestros corredores. Hoy vienes, mañana no, y después si. Y el trabajo y la ilusión que has puesto en esto, es eso, ilusión.
Carlos despertó de la pesadilla y se movilizó para recuperar la plaza que le correspondía, pero, ¿si no hubiese despertado?
Hemos vivido, y estamos viviendo una situación bochornosa para nuestro deporte, y consideramos que esto no se soluciona con un tirón de orejas al seleccionador, ni con dar marcha atrás a una decisión que cuesta miles de euros a un deportista.
Carlos ha tenido suerte, porque él, este año, es olímpico, y un deportista olímpico, debe ser escuchado. Quizá en otras circunstancias, esto habría sido un «chanchullo» más entre los tantos que pueblan el mundo.
Quien no ha tenido suerte es Ruzafa, que ha recibido la mejor y la peor noticia que se le puede dar a un deportista, las dos juntas, en un plazo de diez días. Así, gratuitamente. Si ahora Carlos recupera la tranquilidad, Rubén regresa a la incertidumbre de saber que si todo sale bien para los demás, él no estará en la línea de salida.
Pero esto no puede ni debe quedar impune. No podemos jugar con la ilusión ni con el dinero de los deportistas que nos representan a todos, porque ellos son quienes están dándolo todo. Ellos son quienes sufren, ellos son quienes ganan las carreras, y ellos no deben ser quienes paguen los errores de los demás.
Todos presionan y luchan para estar ahí, y de la federación depende que la elección sea justa, ética y sobre todo deportiva.
Un seleccionador, Cristóbal en este caso, no puede tomar a la ligera, una decisión que, ovbiamente no ha sido debatida en pleno en la federación correspondiente, para saber el alcance de la misma, de haber sido debatida en su día, no sería necesario ahora recapacitar sobre ella. No hacía falta ser un genio para saber que esto, no iba a llegar muy lejos. Desconocemos la causa que ha motivado este escándalo, o queremos fingir que la desconocemos. Pero tenemos claro que se ha cometido un error muy grave, y deben depurarse responsabilidades.
Han jugado con la preparación de los deportistas olímpicos, con la imagen de este deporte, y lo peor de todo, Carlos ahora tendrá que afrontar la cita olímpica con la presión de saber que todas las miradas estarán puestas sobre él, y quizá algunos esperan que falle para que su fallo justifique los errores de los demás.
Para los aficionados, quizá hoy Carlos ya haya cumplido de sobra con el cometido de ser olímpico, ya ha hecho bastante por el mountainbike español y merece esa plaza porque en su día cumplió los criterios para lograrla.
No se trata de un debate abierto, sobre si debe ir Carlos o Ruben, sino que se trata de cumplir lo establecido, y se trata de que las reglas sean las mismas para todos. Si Carlos no tiene un rendimiento ejemplar según el seleccionador, entonces quizá debiese también relevar a Hermida y hacer lo propio con Rocio Gamonal como suplente en beneficio de una sorprendente Anna Villar.
Pero todos estamos de acuerdo en que hay unos criterios éticos y morales, que impiden que esto se convierta en un ir y venir de corredores, según vayan rindiendo en las carreras, o según se tercie.
Ahora la lanza se rompe en favor de Ruben Ruzafa, el cuarto en discordia que ha sido protagonista de la peor forma que podría serlo. Hoy, el día en que Carlos regresa a su feudo, Ruben tendrá que pensar que quizá, dentro de cuatro años, si, esa sea su cita olímpica. Mientras tanto, tendremos que esperar a ver qué culebron nos preparan en la federación para la próxima edición de los JJOO.
Por nuestra parte, vamos a dedicar este último párrafo a nuestros protagonistas; Carlos, José Antonio, Iñaki y Marga. Vosotros sois y seréis los protagonistas de la cita olímpica, nada podrá empañar vuestro trabajo y el esfuerzo que supone estar en lo más alto cada día. El logro no es Pekin, el logro es haber llegado hasta aqui, el premio si, el premio es Pekin.