Una historia que muestra como ha afectado el cambio de escenario internacional en el deporte de élite
El equipo Ghost Factory Racing, compuesto íntegramente por féminas, es uno de los conjuntos más reconocidos e implantados en el panorama competitivo internacional. Tanto su imagen como la calidad de sus integrantes lo sitúan en la élite mundial. El plan para arrancar este año tan importante era claro. Un primer stage en Sudáfrica que acabaría con algunas de sus corredoras compitiendo en la Absa Cape Epic. La mejor forma de iniciar su preparación física, acoplarse al nuevo material y sentar las bases para un nuevo año. Pero la pandemia de coronavirus acabó con todo y ahora el enfoque de sus integrantes ha cambiado por completo. Esta es su historia.
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