Ya está más que confirmado. Mathieu Van der Poel va fuerte a por el MTB. Es joven, repleto de talento y con un físico privilegiado. Cuenta con muy poca experiencia en el MTB, pero a tenor de las lecciones de técnica y fluidez que ha mostrado en el ciclocross, parece que su adaptación a nuestro deporte puede ser rápida.
El holandés quiere estar en Rio de Janeiro y no lo tiene fácil. De entrada, no tiene puntos UCI, así que para él empieza una caza de puntos por todo el mundo. Su primera parada será, como para casi todos los cracks del XCO mundial, las pruebas de Chipre, especialmente la Afxentia Race de la Sunshine Cup, que con categoría SHC está al nivel de la Absa Cape Epic.
Además allí podremos ver como se mide con bikers de talla mundial. Estarán Kulhavy, el Multivan-Merida y una larga lista de estrellas.
Para ello Stevens, la marca de bicicletas que le patrocina, le ha preparado su primera MTB de competición. Con la base del cuadro Stevens Sonora SL y con Shimano como uno de los principales patrocinadores lo que más llama la atención de la bicicleta que ha mostrado Van der Poel es el uso de horquilla rígida. Acostumbrado al ciclocross está claro que sabe como nadie lo que es rodar con una bicicleta totalmente rígida, pero habrá que ver si realmente esa es también su apuesta en competición.
De momento le sobra para marcarse saltos como este.
En cuanto al montaje ha optado por un Shimano XTR Di2 con monoplato. No faltan los frenos XTR, componentes PRO y ruedas… Shimano Deore XT.