La idea inicial es comprobar qué se puede lograr con el uso de inteligencia artificial para detectar posibles casos de dopaje
Aunque los métodos de detección de dopaje son cada día más avanzados la realidad es que el uso de sustancias prohibidas sigue estando presente en el deporte. La WADA apuesta ahora por dar un paso más e intentar usar todo el poder de las últimas tecnologías para detectar el dopaje. Esta semana han anunciado un acuerdo con el Fonds de recherche du Québec para poner en marcha 3 proyectos con los que explorar las posibilidades de la inteligencia artificial en la lucha contra el doping.
El Dr. Oliver Rabin, parte de la WADA, explicaba que «La inteligencia artificial es una área por explorar y la WADA cree que hay un enorme potencial para que sea empleada en el anti-doping, especialmente en lo que se refiere al análisis del big data. Con el paso del tiempo creemos que tendrá un impacto enorme. Estos 3 proyectos lanzados nos ayudarán a arrojar luz sobre su potencial dentro del contexto de las pruebas anti-doping y estamos encantados por poder ser una pieza clave de investigación.»
Hasta ahora los programas anti-doping de la WADA han introducido sistemas como el pasaporte biológico, el sistema de TUE (para el uso de medicamentos con autorización) y los controles fuera de competición. Pero la IA promete proporcionar nuevas herramientas para completar su labor.
El primero de los proyectos se realizará junto a la empresa Dataperformers de Montreal, creada en 2013 en colaboración con un laboratorio de París acreditado por la WADA. En él se prueban los resultados del uso de inteligencia artificial para detectar el uso de sustancias y métodos prohibidos. Si es exitoso, la IA podrá ser utilizada para analizar los datos que la WADA tiene de cada deportista gracias a su pasaporte biológico que, actualmente, usa un algoritmo adaptativo para determinar si un test poco usual es resultado de una adaptación natural del cuerpo o del uso de sustancias prohibidas.
El segundo proyecto se llevará a cabo con Element AI, otra empresa de Montreal, que explorará el riesgo de dopaje en deportistas a través de su tecnología y, a partir de ahí, desarrollará tests en base a algoritmos.
El último será con el Centre for Genomics and Politics at McGill University de Montreal y se centrará en entender cómo puede influenciar y como se recibirá el uso de la IA en las diferentes partes interesadas en este asunta. Desde la WADA a organizaciones anti-doping, deportistas y público.