La Afxentia Stage Race que se celebra desde hace años en Chipre es una de las referencias del XCO internacional. De hecho, es una de las 4 únicas pruebas del mundo con categoría SHC en el calendario UCI. El buen clima de esta isla mediterránea, las facilidades para el hospedaje y entrenamiento de los equipos y, sobre todo, la ingente cantidad de puntos UCI puestos en juego son un imán perfecto para que cada temporada sea la prueba con mayor nivel del mundo antes de la Absa Cape Epic.
Este año no ha sido una excepción y ahí estaban prácticamente todos los equipos punteros a nivel mundial. Desde Kulhavy a Fumic pasando por Jolanda Neff o Pauline Ferrand Prevot.
La prueba se celebra con un formato de 4 etapas. Arranca con un crono, dos pruebas en línea y una carrera de XCO. Jornada variadas siempre con un marcado carácter XC y con un nivel de Copa del Mundo.
La crono, semi-urbana de 5,7km, servía para ver quienes venían con opciones de ganar. Florian Vogel fue el más rápido, estrenando con victoria sus nuevos colores de Focus.
Tras él entraban Tempier (el único en quedarse a menos de 20 segundos del ganador), el inglés Ferguson, Avancini (que estrenaba colores del Cannondale Factory Racing) y Marotte, completando el top-10.
La prueba vio como el danés Simon Andreassen, que compite con el maillot de campeón del mundo junior porque ganó el mundial en su primer año en la categoría, realizaba toda una exhibición y a pesar de que, según él, estaba afectado por un resfriado, marcaba el 10º mejor tiempo absoluto, entre Kulhavy y Fumic.