Fork Juice fue el producto que dio vida a toda una nueva compañía de elementos para cuidar nuestra bicicleta, Juice Lubes. Con sede en Inglaterra, esta fue su primera creación, que tuvo tal éxito que permitió un rápido crecimiento y una ampliación de su catálogo en muy poco tiempo. 2009 fue el año de su presentación, y desde entonces se han vendido decenas de miles de unidades de Fork Juice.
¿Y qué es el Fork Juice? Se trata de un spray que contiene un líquido lubricante para las barras de las suspensiones. Con su aplicación se reduce la fricción entre las barras y los retenes, mejorando la suavidad de funcionamiento y la capacidad de absorción de la horquilla. Además, sirve para protegerla de las inclemencias del tiempo, reduciendo su efecto en el buen funcionamiento de la suspensión.
Su aplicación es muy sencilla. Basta cubrir los discos de freno con algún trapo limpio para evitar que el spray puede contaminarlos, y aplicarlo directamente sobre las barras limpias de la horquilla (o amortiguador). Tras un par de compresiones notaremos que la suavidad de acción de la horquilla mejora, especialmente en su primer tramo de activación, es decir, ante los pequeños impactos. Eso significa que la horquilla trabajará con mayor facilidad en su inicio, absorbiendo irregularidades que hasta el momento absorbías tú con tu cuerpo.
También es útil cuando una horquilla es nueva y los retenes aún no han cedido algo por el uso, dando un tacto más duro y seco del que acabará teniendo con unos días de uso. Con Fork Juice ayudarás a que ese buen tacto esté presente desde el primer día.
Y ¿funciona? Pues sí, funciona sorprendentemente bien. Eso no quiere decir que con su uso no vayas a tener que llevar a revisión tu horquilla como se debe hacer habitualmente, sino que siempre la tendrás rindiendo al máximo. Es muy llamativa la mejora que sufre la horquilla en la mayoría de los casos. Además, su tarea preventiva frente la acumulación y entrada de polvo en el interior (una vez seco crea una pequeña película protectora), alargará la vida de la suspensión. Una vez lo usas y te acostumbras a la suavidad de uso que da, será difícil despegarse del Fork Juice.
¿A que no saldrías de casa con la cadena sin engrasar? Pues cuando pruebas Fork Juice no quieres salir de casa con la horquilla sin engrasar.
Si tenemos en cuenta su ajustado precio y su buenos resultados, es una gran inversión para nuestra bicicleta, y una forma de darle un pequeño turbo a su funcionamiento.