Este fin de semana por Vigo se transitaba sobre ruedas: los mejores riders de la escena internacional viajaban a esta ciudad para participar en la XXII edición de Arnette-O’Marisquiño: el mayor evento de deporte urbano celebrado en nuestro país.
Desde el jueves y hasta hoy domingo, más de 1.000 deportistas procedentes de 50 nacionalidades diferentes han participado en el evento, que goza de una gran reputación dentro del sector.
La gran novedad esta edición fue el Big Jump “Chimpo do Carallo”, en el que skaters y bikers disfrutaron a lo lindo probando trucos nunca vistos antes en nuestro país, como el backflip que se planchó el skater de Arnette Danny León.
En BMX, tanto en la modalidad de Street como en la de Big Jump, el rider Arnette Daniel Peñafiel “Naran” volvía a demostrar que es el verdadero rey en nuestro país. Lograba la primera posición por segundo año consecutivo.
En skate, más de 100 riders luchaban por llegar a lo alto de la clasificación. Cima que finalmente tocó el portugués Jorge Simon, seguido de su compatriota Rubén Rodrígues y el brasileño Roger Silva.
En Red Bull Dirt Jump, el español Xavier Pasamonte se llevó la victoria, seguido del ruso Pabel Alkhin y de Jed Mildon (Nueva Zelanda), el único rider que hasta el momento ha conseguido hacer el triple Backflip.
El descenso MTB Down Town es una de las pruebas que más expectación causan dentro de Arnette-O’Marisquiño. Vigo entero se convierte en una gran rampa desde el Castillo de San Sebastián hasta el puerto. Los pilotos atraviesan el corazón de la ciudad y descienden por el Casco Vello, sorteando bancos, escaleras y saltos hasta el recinto del evento, en el Náutico.
El fútbol también ha tenido su hueco en esta edición, pero con un toque original y diferente al que estamos acostumbrados. El Red Bull Street Style buscaba al mejor freestyler del panorama nacional, a quien darían el billete para viajar en septiembre a Italia para disputar la final europea de este campeonato internacional. Nada menos que un local se llevó el título: Dani Comesaña.
Además de todas las actividades deportivas que se han desarrollado, también la vertiente cultural de este festival es fundamental. El mural de graffiti es su expresión más palpable, los artistas han estado trabajando durante dos días para terminar sus obras maestras.
Por la noche el Arnette-O’Marisquiño seguía en marcha ofreciendo conciertos como los de Zombie Kids, Duokie y Nasty Mondays.