No es la primera vez que hablamos del neozelandés Anton Cooper en ESMTB.com. Todavía es junior pero sus actuaciones son más que llamativas. Si el año pasado llegaba al circuito internacional ganando pruebas de la Copa del Mundo junior a pesar de ser de primer año, y en el mundial era 2º a pesar de una caída en la salida, este año está acabando de forjar su pequeña leyenda en esta categoría.
Tras ausentarse de las últimas pruebas de la Copa del Mundo por estudios, ha vuelto a aparecer en la prueba canadiense este pasado fin de semana. Cooper ganaba la carrera con cerca de 6 minutos y medio de ventaja sobre el segundo clasificado, en una competición que no llegada la hora y diez minutos de duración.
Pero si algo llamaba la atención eran sus tiempos por vuelta:
- 17’10» – Le hubiese dado la 10ª posición en la prueba elite
- 17’36» – 18º mejor tiempo elite
- 17’42» – 19º mejor tiempo elite
- 17’27» – 11º mejor tiempo elite
Todo ello con 17 años y rodando sin presión por la victoria. Obviamente en elite hubiese tenido que dar 2 vueltas más, pero su ritmo de carrera es algo nunca visto en un corredor junior, ni en la época de Kulhavy (otro corredor que dominó la categoría junior con mano de hierro) se veían estos números.
El equipo Trek World Racing y su mánager, Martin Whiteley, ya intentan cuidar a esta perla del XC para que su fama en las categorías inferiores no acabe con su potencial una vez de el salto a sub-23.
Esta año Nueva Zelanda intentó darle su plaza olímpica, pero el reglamente se lo impidió debido a la juventud del corredor, que debía contar, al menos, con 18 años para poder ser inscrito en la prueba. No obstante, en los campeonatos de Nueva Zelanda fue capaz de dar caza a todos los elite a pesar de salir dos minutos después de ellos.
