Anton Cooper aún es un corredor de categoría junior, pero el tamaño de sus hazañas ha superado la acotada línea de repercusión que suele tener esta categoría y ha traspasado fronteras al punto de crear una expectación pocas veces vivida ante un biker tan joven.
Es neozelandes, y en lo que va de año ya ha logrado gestas como ganar a todos los elite en una prueba de la Copa de Nueva Zelanda de XC, o la semana pasada, marcar tiempos de top-5 en la carrera previa a la Copa del Mundo. Con ello, todas las miradas están puestas en él, y Martin Whiteley ya le ha «atado» para su equipo Trek World Racing.
En la primera prueba de la Copa del Mundo volvía a sumar una nueva exhibición. En un recorrido mucho más complicado que en la prueba elite a causa de la lluvia caída por la noche (los junior corrían el domingo) Cooper se distanciaba desde los primeros metros y ganaba con cerca de 5 minutos de ventaja sobre Victor Koretzky, el campeón de Francia.
«He tenido una buena salida, y he entrado primero en el singletrack. Estaba muy resbaladizo, pero iba bien. He podido ganar tiempo vuelta a vuelta» explicaba el propio biker.