El XC Eliminator es un formato casi recién nacido en el mountain bike. El año pasado se celebró por primera vez una Copa del Mundo y un Campeonato del Mundo de esta modalidad, y si algo quedó claro con su disputa es que todavía tiene que madurar mucho para ser una disciplina consolidada en el mountain bike. El diseño de los circuitos fue un punto muy criticado en la mayoría de los casos, y solo Houffalize parace que consiguió un recorrido acorde a lo que los corredores de esta modalidad esperaban. La fecha de las pruebas, y su formato, también es una barrera importante para que los corredores de XC apuesten de forma seria y comprometida por esta modalidad.
Sin embargo, la UCI, tras reunirse en Louisville el pasado fin de semana, ha expresado al Comité Olímpico Internacional su desee de que sea una nueva modalidad olímpica en 2016.
Peter Van den Abeele explica su inesperada apueste: «La propuesta se ha hecho teniendo en mente que a la COI le gustan los deportes de nuevas disciplina, especialmente los que tienen un formato intenso y moderno como el eliminator. El proceso para que una modalidad se vuelva olímpica es sencillo, todas las federaciones internacionales son requeridas para expresar su opinión al respecto, y el mando ejecutivo de la IOC decide si entran en el nuevo programa.»
En cualquier caso parece una apuesta más que arriesgada. El eliminator apenas cuenta con pruebas a parte de las de Copa del Mundo y algunas agregadas a grandes citas de XC.
