Con 21 ediciones a sus espaldas la Dolomiti Superbike no necesita carta de presentación. Es una de las grandes citas del calendario del bike-maraton. Ha sido parte de la extinta Copa del Mundo de bike-maraton, sede el Campeonato del Mundo de bike-maraton en una ocasión e integrante del calendario de la UCI Maraton Series más de una vez.
Este año ofrecía su tradicional recorrido de 113km y 3.357 metros de desnivel que se disputaba en sentido horario.
El trazado de la Dolomiti Superbike no cuenta con pasos especialmente técnicos y permite disputarse tanto en sentido horario como en antihorario, cosa que la organización va turnando dependiendo del año.
La gran noticia de este año era que alcanzaba su record de participantes con 5.500 bikers en la línea de salida.
Era el debut en competición de Alban Lakata como nuevo campeón del mundo de bike-maraton.
Pero el mejor del día fue el portugués Tiago Ferreira que logró completar el trazado en 4:26:22, llegando en solitario a la línea de meta situada en Villabassa.
Se impuso a su compañero de equipo, y ex-campeón del mundo, el griego Ilias Periklis.
La prueba tuvo a buena parte de los protagonistas del pasado Mundial de Val Gardena. Entre ellos el colombiano Leonardo Paez o el italiano Damiano Ferraro.
En féminas la mejor fue la austriaca Christina Kollmann, que con un crono de 5:27:04 superó en más de 7 minutos a Annabella Stropparo.
La Dolomiti Superbike ofrece paisajes de excepción. De hecho este es uno de los grandes atractivos de una prueba que en su mayor parte transcurre por pistas y donde la presencia de trialeras es testimonial.