La prueba femenina de la Copa del Mundo de XCO en Dalby Forrest arrancaba con una noticia surrealista como pocas. La vencedora en este circuito el año pasado, la rusa Irina Kalentieva, no podía tomar la salida. En un principio se alegaban problemas burocráticos, pero finalmente parece ser que la rusa se encontraba con fiebre y ha preferido no salir.
Con una de las máximas aspirantes al podio fuera de carrera, la prueba arrancaba a las 10:45 hora local, con un viento muy frío y 13 grados de temperatura. Las corredoras debían realizar 5 vueltas al trazado que se encontraba en perfecto estado a pesar de la violenta tormenta que cayó durante la noche. 85 bikers en la salida, entre ellas la estrella británica del DH, Tracy Moseley, convertida por un día en corredora de XC. También Anneke Beerten, de la que ya comentamos que está intentando adaptarse al XC en busca de una plaza olímpica.
Eva Lechner, Lene Byberg, Ren Chengyuan y Nathalie Schneitter eran las protagonista en los primeros compases. Poco a poco, y mientras la biker china Ren Chengyuan intentaba destacarse, por detrás contactaba la francesa Julie Bresset, que se había retrasado en la salida por una caída. Sabine Spitz también se sumaba al grupo cabecero que rápidamente se fragmentaba. La francesa y la china se destacaban, mientras Spitz y Wloszczowska, la polaca campeona del mundo, formaban el grupo perseguidor. Las posiciones se mantenían bastante estables, con el dúo cabecera consolidando su ventaja, y Wloszczowska que dejaba a Spitz.
Tras ella, la danesa Annika Langvad conseguía remontar de forma espectacular, pasando de la 17ª posición en la primera vuelta a la 3ª. En cabeza de carrera, y ya en el último giro, Ren Chengyuan se quedaba sin pelear por el triunfo a causa de un pinchazo. La última vuelta veía como Wloszczowska cedía para acabar 6ª, Spitz remontaba hasta la 3ª plaza, sin poder alcanzar a Langvad que era 2ª, con Lechner 4ª y Chengyuan 5ª.
El triunfo, para Julie Bresset de forma inesperada, y siendo la primera corredora sub-23 en la historia de la Copa del Mundo que logra ganar una prueba femenina de forma absoluta.