La Absa Cape Epic arrancó el domingo con la prólogo. Pero fue ayer lunes cuando se puede decir que la carrera entró en su terreno real.
La primera jornada en línea de la competición. Por delante 108km con 2.450 metros de desnivel positivo entre Robertson y Arabella Wines.
Un auténtico shock al cuerpo que se encuentra con un esfuerzo enorme tras semanas de entrenamiento y el obligado reposo previo a la competición. El recorrido contaba con 3 ascensiones destacadas, todas ellas condensadas en 45km situados a mitad de etapa.
Por su fuera poco la lluvia endureció la competición y puso a prueba a todos los equipos y a sus bicicletas.
Con las fuerzas intactas, la primera jornada suele ofrecer una enorme «escabechina» en la general de la prueba. Este año no sería menos.
Prácticamente todas las categorías vieron como se producían cambios en sus lideratos. Unos cambios especialmente drásticos en la general absoluta, tanto masculina como femenina.
Como siempre, el brutal terreno de Sudáfrica dejó huella en el trazado. Muchos kilómetros de pista de Jeep (la típica «pista» con una rodera a cada lado que acaba siendo una especie de trialera de doble carril) y un terreno roto y resbaladizo por el agua caída.
Los paisajes en la Absa Cape Epic siempre acompañan para que los fotógrafos puedan lucirse.
Los líderes en Grand Master, Andrew Mclean & Hein Zoerweg, sufriendo para no perder el maillot sobre el barro y la hierba pisada de algunos tramos de la etapa.
Esther Suss y Sally Bigham se auparon al liderato de la general tras una etapa sin fallos en la que las líderes pasaron por un calvario para poder llegar a la línea de meta.
A pesar de las duras condiciones, siempre hay tiempo para un poco de diversión extra. Cuando las fuerzas acompañan…
La niebla fue compañera de viaje de los corredores durante muchos kilómetros.
Karl Platt al paso por el Hot Spot de la etapa. Su equipo no tuvo su mejor día, pero como el mismo dijo, lo importante era no perder la carrera en la primera etapa. Ya vendrán días en los que atacar.
A Nino Schurter no le quedó más remedio que divertirse de esta forma. Su compañero de equipo pasó por un día terrible. Así que Nino sacó a relucir su gama de acrobacias.
Hynek y Mennen, del Topeak-Ergon, lograron superar la etapa entrando a 7 minutos de los vencedores. No perder una minutada era todo un triunfo en una jornada en la que la mecánica y los problemas físicos estuvieron a la orden del día.
Los grandes triunfadores del día fuero Markus Kaufmann y Jochen Kaess. Ganaron la etapa y se hicieron con el maillot de líderes. No se libraron de los problemas, porque también pincharon como casi todos los equipos del top-10, pero supieron ser los mejores. Recordemos que vienen de ganar la Andalucía Bike Race con autoridad.
El equipo de Sauser y Rabon se reivindicó en esta jornada. Fueron 2º en la etapa y recuperaron posiciones en la general hasta situarse en la 3ª posición. En cualquier caso, Sauser se muestra por encima del rendimiento de Rabon en casi todos los tramos de la etapa. ¿Podrá el checo seguir el ritmo del suizo sin morir en el intento durante los días que quedan?
Y Frantisek Rabon en acción, en la imagen habitual de la etapa. En solitario persiguiendo a Sauser. Según explicó espera ir a más en cada etapa gracias a su experiencia en las carreras por etapas de carretera. También descubrió lo que es el MTB de competición. «Es mucho más duro que la carretera. En la carretera te puedes esconder en el pelotón y pasar muchos kilómetros recuperando. Aquí no hay sitio para esconderse. Desde el primer metro eres tu sólo contra el recorrido y los rivales.»
¿Hemos dicho que Nino Schurter tuvo el día libre en la oficina? ¿Sí? Pues aquí va otra muestra.
Sin ser su mejor etapa Urs Huber y Karl Platt entraron a 11 minutos de los ganadores en la 7ª plaza. Su solidez es su principal arma.
Abraao Azevedo y Bart Brentjens (sí, el incombustible Bart Brentjens) aspiran al triunfo en master. Esta vez «sólo» pudieron ser 4º de la etapa en su categoría.
La dureza de la jornada (casi 6 horas sobre la bici para los ganadores) pasará factura en los próximos días.
Y una de las imágenes más repetidas en la 1ª etapa. Los pinchazos y los problemas mecánicos. Como ejemplo, hasta 5 veces pincharon en el equipo BMC de Fluckiger y Fanger. Pero no fueron la excepción. Sauser y Rabon también tuvieron más de un pinchazo y los equipos de apoyo les salvaron de perder mucho más tiempo.
Doug Brown y Barti Bucher, de la categoría grand master, tirando de un grupo donde estaban los integrantes del equipo Buff Joan Llordella y Pau Zamora. Ambos son todos unos veteranos en la prueba. Su principal carta será la solidez en todas las etapas.
Y pocas etapas de la Absa Cape Epic se libran de tener algún tramo de cargar la bicicleta. Sí Sauser tiene que arrastrarla… imaginar el resto de los mortales.
Philip Buys, el compañero de Nino Schurter, no tuvo su día. «Creo que ha sido mi peor día sobre una bicicleta. Lo siento por Nino Schurter, que ha tenido mucha paciencia conmigo esperándome. Espero mejorar las próximas etapas.»
Kevin Evans es otro de los grandes veteranos de la carrera. Durante años ha peleado por ganar la general, pero este año su objetivo es el maillot de líderes de equipos sudafricanos.
Más de 30 minutos perdió Annika Langvad y su pareja a causa de los problemas mecánicos y los pinchazos. Todo un drama llegar a meta. Adiós al liderato y la obligación de atacar cada día para intentar volver a conseguirlo.
Aunque el mayor drama del día fue el sufrido por los líderes absolutos. Jose Antonio Hermida y Rudi van Houts. El catalán tuvo graves problemas físicos a causa de una reacción alérgica a algo comido en el desayuno. Su historia completa aquí. Llegar a meta fue la mayor victoria.
Y otra toma más de otro de los problemas sufridos por el equipo líder femenino. En este caso Ariane Kleinhans trata de ayudar a Langvad en otra nueva reparación.
Para los amateurs, la jornada fue épica. Y lo que les queda por vivir.
Aún con las duras condiciones, fue la primera etapa con menos índice de abandonos de toda la historia de la carrera. Los bikers cada día llegan más preparados.
La gloria de los ganadores de etapa y nuevos líderes de la general de la Absa Cape Epic. Markus Kaufmann y Jochen Kaess.
Y tras ellos un enorme sprint de 5 equipos. Una de los finales más ajustados de la historia de la prueba.
La alegría de llegar a meta encarnada por Tim Boehme y Simon Stiebjahn. Lograron una sensacional 4ª plaza. Fueron el mejor equipo Bulls. Los Bulls colocaron a sus 3 equipos en el top-10.
Acaba la jornada para los bikers, pero empieza para los mecánicos…
