El joven Thomas Litscher, uno de los corredores que viene pisando con fuerza desde las categorías inferiores y que ya sabe lo que es el top-10 de una Copa del Mundo, ha tenido que poner punto y final a su temporada 2013.
El suizo hace ya semanas que arrastra problemas físicos que no le han permitido rendir a su nivel habitual. Tras pasar cerca de 3 semanas entrenando en altura en St. Mortiz para preparar la Copa del Mundo de Vallnord, su rendimiento en la prueba andorrana quedaba muy lejos de lo esperado. A pesar de no ser un circuito del agrado del biker de Multivan-Merida, su 29ª plaza era un resultado muy alejado de su prestación en citas anteriores.
Su problema viene de hace tiempo. La presión sobre el sillín le genera dolores en la zona de contacto y problemas musculares que se extiende hacia la espalda llegando a hacer imposible el ir en bicicleta. Este mismo invierno tuvo que parar dos meses por completo para centrarse en reforzar su físico de cara a evitarlo, algo que parecía haber solventado visto su arranque de campaña.
Pero tras Vallnord la situación no ha mejorado. Viajó a Canadá para probar suerte, pero el dolor volvía y al acudir al médico se comprobó la aparición de un nuevo absceso en la zona afectada que sólo se puede tratar quirúrgicamente.
Tras verse obligado a retirarse en carrera por el dolor, a su vuelta a Suiza ha decidido operarse para tratar de solventar los problemas para siempre, y el próximo 20 de agosto pasará por el quirófano. Lo más probable es que deba permanecer unos 2 meses sin ir en bicicleta para asegurar una total recuperación.
