Desde que KTM lanzó su modelo rígido Myroon en 2016 no ha parado de trabajar en él para rebajar su peso y convertirlo en una referencia entre los modelos rígidos ultralight.
La para gama del año pasado se presentó la versión KTM Myroon Sonic, un apellido que se une a los modelos realizamos con el mejor acabado y tratamiento del carbono posible, lo que se traduce en menos peso sin disminución del rendimiento.
Visualmente todo los cuadros Myroon de carbono son iguales, pero los Sonic cuentan con una distribución y elección de fibras diferente para conseguir el menor peso posible en la báscula. De cara a 2018 la Myroon Sonic hace un nuevo esfuerzo en su construcción para situarse, por primera vez, por debajo de la barrera de los 1.000 gramos. El cuadro KTM Myroon Sonic 2018, que pudimos tocar y ver en persona, pesará sólo 975 gramos.
Continúa tras los patrocinadores
En 2016 el cuadro Myroon pesaba 1.260 gramos. En 2017 se redujo el peso hasta los 1.085 gramos. Y en 2018 llegará a esa cifra de 975 gramos, lo que supone una reducción del 33% del peso. Y todo ello incrementando la rigidez en los tests de laboratorio. De esta forma es un 20% más rígido que el modelo anterior lo que hace que tenga la mejor relación peso-rigidez de la historia de la marca austriaca.
La combinación de cambios en la distribución de las fibras con nuevos procesos de construcción ha llevado a este punto. El uso de fibras de alto módulo 40T y nano tecnología han permitido llegar a los objetivos de peso marcados. También el acabado interior, que no es visible, se ha mejorado, siendo ahora más liso y con menos imperfecciones, lo que repercute en el peso.
Con ello la KTM Myroon Sonic se convertirá en una referencia para aquellos que tienen el mínimo peso como una prioridad a la hora de escoger una bicicleta rígida.
