«A un Mundial se viene con mentalidad de ganar; puedes ponerte a rueda y ver qué deciden hacer las otras, o ponerte a tirar y tomar las riendas. Lo primero no va conmigo«, comentaba Sandra tras la carrera de ayer en Laissac, Francia.
La corredora de Sabadell viajaba a la cita mundialista con la intención de estar entre las diez primeras, tras las sensaciones del pasado Campeonato de Europa, pero con la duda de si estaría recuperada de una gastroenteritis que la tubo ingresada el pasado fin de semana.
El circuito en Laissac tenía un recorrido de 70km y 2.400 metros de desnivel, con subidas duras y alguna especialmente técnica al inicio de la competición, lo que dificultaba la creación de grupos numerosos. Ya desde los primeros compases de carrera, Sandra se ponía el mono de trabajo y, aprovechando las primeras zonas complicadas del trazado, se colocaba sobre la décima posición. De ahí, a sumar kilómetros y superar ascensiones, rodando siempre cercana a ese objetivo del top ten. Pero esas buenas vibraciones no iban a durar hasta meta y a partir de mitad de carrera se notaba vacía y perdía algunas posiciones en el tramo final, llevándose finalmente la 19ª posición.
«Me quedo con lo mejor, que han sido las sensaciones al principio de carrera. Iba fácil y me sentía con la confianza de luchar por el objetivo marcado. Aun así, después de mitad de carrera nos hemos perdido un grupo de corredoras y, seguidamente, la debilidad que me dejó mi problema de salud del pasado fin de seman ha empezado a hacerse evidente. Iba sobre la 10ª, pero no ha podido ser. Lo he dado todo y no me he guardado nada. Al final he recuperado un poco, entrando la 19 pero con sensaciones agridulces«, comentaba la corredora del MMR-Powerade.
Sandra remata que se siente «muy motivada para el Campeonato de España de XCO«. Toda una declaracióin de intenciones.
