El Pabellón Municipal Girona – Fontajau respiró el ambiente de las grandes ocasiones. A las ocho de la mañana 1.000 ciclistas inundaban las Ribes del Ter dispuestos a tomar la salida de la Girona MTB Challenge. Una auténtica maratón de bicicleta de montaña de 100 kilómetros y 2500 metros de desnivel positivo que recorría los caminos y senderos que rodean la capital gerundense, especialmente los del Valle de Llémena. Una carrera que no olvidarán Oriol Colomé y Nuria Surià, que se coronarían como los más rápidos de esta segunda edición.
Desde el disparo de salida el maillot rojo de Bicis Esteve ha brillado por encima de los demás. Respondía al nombre de un Oriol Colomé que viajaba a Girona antes del gran reto de la temporada. «Es el último test antes de ir a Marruecos a correr la Titan Desert» afirmaba. Y lo ha superado con una nota inmejorable. Desde los primeros compases ha liderado la prueba; primero pedaleando codo a codo con Jordi Quintana (Cromoly) y posteriormente con Pau Zamora (BUFF).