La Rioja Bike Race acaba de concluir su segunda edición, que ya antes de arrancar era todo un éxito solo con mirar su lista de inscripción: 1.100 bikers se habían apuntado a descubrir el entorno de Logroño sobre una BTT. Números de primera división para una competición que sólo tiene dos ediciones.
Su cercanía con la Copa del Mundo de XCO que arrancará en Nove Mesto esta semana le restó, probablemente, participación de primer nivel en el plano internacional, por lo que estaba claro que la pelea por la victoria iba a ser una cuestión de bikers nacionales (si contamos al argentino Soto como uno de los bikers habituales del calendario nacional).
Los recorridos siguieron en esencia, los trazados del año pasado, aunque con numerosas variaciones que aportaron, sobre todo, nuevos tramos de sendero en detrimento de pista, lo que en general se ha mostrado como un acierto y a proporcionado gratas sorpresas a los bikers que ya habían competido en la primera edición.
También se alteró el orden de dureza de las jornadas. Si el año pasado la etapa más larga se situaba en el tercer día, este año se ubicaba justo en mitad de la carrera, en el segundo día. La Rioja Bike Race se abría con la etapa más sencilla y se cerraba con la que para muchos ha sido la más dura, a pesar de no ser la más larga.
Desde el primer día el dúo Coloma/Soto demostró que estaba aquí para ganar. A su favor tenían un factor totalmente diferencial. Conocer el terreno como la palma de su mano. Un hecho clave en muchos compases de la competición.
Coloma, como el año pasado, asestó el golpe definitivo el primer día. Ganó en solitario y con un amplio margen respecto a sus dos inmediatos perseguidores, su compañero de equipo en el MMR Catriel Soto y el catalán de Primaflor-Orbea Ismael Ventura, que había sido 3º en 2014.
David Valero se había mostrado como uno de los corredores más fuertes del día, pero un error en un cruce hizo que perdiese la posibilidad de disputar la victoria en la general final, algo que podría haber estado peleando de no ser por ese contratiempo.
El viento fue un elemento que endureció en gran medida los trazados, especialmente en la primera jornada, cuando sopló con especial virulencia.
El peculiar diseño de las etapas de La Rioja Bike Race, con un tramo inicial y final siempre rodador de alrededor de 10km es uno de los rasgos que distinguen a esta carrera y que ofrece finales en grupo y emoción en los kilómetros finales, cuando la táctica entra en juego.
La segunda etapa, con más de 80km y algo más de 2.000 metros de desnivel positivo incluía el famoso paso del sendero de la calzada romana, uno de los tramos predilectos por los bikers. E introducía un exigente tramo de ascensión por sendero en su parte final.
Este segundo día fue una exhibición del MMR con Catriel Soto ganando la etapa en su primera participación en la carrera, y con Coloma entrando a su rueda y confirmando su liderato. El suizo Lukas Buchli, un especialista en pruebas de larga distancia y por etapas, completaba el podio de la jornada.
El principal damnificado de la etapa era Ventura que perdía sus opciones de podio tras una doble rotura de cadena. Mientras, Valero emprendía su remontada camino del podio final en la carrera.
De esta jornada también destacó la larga escapada inicial de Julen Zubero, que tras atacar de salida rodó en solitario durante más de 25km.
El último día, lejos de ser un paseo y a pesar de ser más corto en distancia con 66km, tenía el mismo desnivel que la etapa del día anterior, con lo que toda su dureza estaba mucho más concentrada.
La primera ascensión servía para ver quienes estaban en condición de disputar la victoria final. David Valero lanzaba una apuesta arriesgada, escapándose y rompiendo la carrera. Ya nadie más le vería hasta meta, logrando un más que merecido triunfo de etapa que también le servía para subir a la 3ª plaza de la general final tras Coloma y Soto.
En categoría femenina los tres días tuvieron el mismo podio. Claudia Galicia se llevó las tres victorias de etapa y la general, por delante de la reciente vencedora de la Titan Desert by Garmin, Anna Ramirez, y de Muriel Bohuet.
En el resto de categorías destacar el dominio absoluto de Tomi Misser en master-40, que no dio opción a sus rivales.
La categoría más igualada a resultado ser la de master-30. Javier Macías partía como líder en el último día, pero un vuelco total ha hecho que acabase fuera del podio final. Alejandro Moya se lleva la general seguido de Roberto Fernández y Pau Egeda.
De esta forma se pone punto y final a la segunda edición de La Rioja Bike Race, que a buen seguro repite en 2016.
Vídeos La Rioja Bike Race 2015