Es casi una tradición en la Absa Cape Epic. Que la primera etapa en línea de la carrera sea una jornada brutal en cuanto a dureza. La forma de mostrar a todos los bikers que lo que les espera no será fácil. Este año no ha sido una excepción y los 113km con 2.800 metros de desnivel han servido para poner a cada uno en su sitio.
Además empieza la rutina de esta semana de competición, que incluye los enormes madrugones como parte del día a día.
A partir de ahora pedalearán horas y horas cada día desde la aparición de las primeras luces del día.
Este es el hogar itinerante de 1.200 bikers durante esta semana.
La jornada de hoy arrancaba con la brutal ascensión al Groenlandberg, una de las subidas más exigentes que tendrán que afrontar los bikers.
Además, con el cuerpo fresco, el ritmo impuesto en esta primera etapa ha sido altísimo desde el principio. Quizás demasiado para muchos de los equipos como se ha podido comprobar en la parte final de la etapa, donde muchos han sufrido para completar la jornada cediendo tiempo.
Los equipos punteros querían aprovechar para marcar las primeras diferencias. Los más de 600 metros de desnivel en 9km de la primera subida han hecho la primera criba seria de la carrera.
Los líderes, Martin Gujan y Fabien Giger, se han despedido del maillot amarillo. Aunque han logrado ser 5º, Giger confesaba que «el ir con una rígida ha hecho que perdiese mucho tiempo en la bajada pedregosa del Groenlandberg«.
Las líderes de la categoría femenina, Ariane Kleinhans y Annika Langvad, han volado en esta jornada. Más de 15 minutos de ventaja sobre las segundas clasificadas hablan por si solos.
Los paisajes, como siempre en la Absa Cape Epic, no decepcionan.
La lluvia no se ha querido perder esta primera etapa y ha añadido un punto de dureza, a pesar de no ser una lluvia especialmente intensa.
La piedra y la arena han sido los elementos con los que más han batallado los bikers.
Los tramos de singletrack han ido en aumento a medida que la carrera se aproximaba a su final en Oak Valley.
Y los ganadores del día. Sauser y Kulhavy. Siguiendo su propia historia de ser los bikers más fuertes, pero también los que suelen sufrir más problemas mecánicos, el triunfo no ha sido fácil.
Esta era la cara de alegría de Langvad y Kleinhans tras vencer. Kleinhans sufría una espeluznante caída, por suerte sin consecuencias.
La jornada ha estado marcada por los pinchazos y averías. El terreno de la etapa no era nada fácil y no solo ha puesto a prueba a los bikers, también al material. Especialmente a los neumáticos.
La salida de la primera etapa, ese día en el que todo el mundo cree que puede estar delante y en el que las piernas aún no se quejan de nada.
Los bikers han podido disfrutar de diferentes paisajes a lo largo del día. De amplias extensiones abiertas a bosque cerrado. Esto es Sudáfrica.
Enorme papel de Hermida y Van Houts. Muy sólidos, han sido 3º en la etapa.
Los puntos de asistencia son auténticos oasis en el desierto para los bikers. No sólo porque ahí encuentran comida, sino porque tienen asistencia mecánica, a veces imprescindible para poder acabar la carrera.
No ha sido un bien día para la pareja de apoyo de Sauser y Kulhavy, los sudafricanos Kleinhans y Bell. Problemas mecánicos les han retrasado mucho cuando rodaban en posiciones de top-10.
Y este es el despertador de la Absa Cape Epic.
Los líderes tampoco se han librado de problemas. En imagen Martin Gujan buscando repuestos en su box de material dentro del área técnica.
La expectación, como siempre en la Absa Cape Epic, es enorme. La carrera de MTB con mejor cobertura y más horas de TV del mundo.
Tan alto es el nivel que el coche que hace el tramo neutralizado tiene que ser un coche de rally.
El ritmo inicial ha pasado factura a más de un equipo. Sólo los 5 mejores equipos han estado menos de 5 horas en el sillín para completar el día.
Y los problemas de Sauser. Que ha pinchado cortando la cubierta por un lateral. Eso cuando iban líderes con más de dos minutos. Han reparado, han tenido que parar en la zona de asistencia para cambiar el neumáticos y aún con eso han remontado para acabar ganando con cerca de un minuto. Son los más fuertes de nuevo, pero la historia de Sauser, Specialized y la Absa Cape Epic está llena de etapas y generales perdidas por problemas mecánicos.
Paisajes majestuosos que muchos no pueden apreciar en carrera.
La peor suerte del día entre los pros ha sido para Emil Lindgren. Una caída le ha provocado una fractura en el codo. Adiós a su carrera.
Sauser en el cambio de rueda en la zona técnica.
Karl Platt fiel a su estrategia. Solidez y constancia. La Absa Cape Epic es muy larga. Ya son segundos de la general.
Una pesadilla en la Absa Cape Epic. Romper el cambio.
¿Quién dijo que las fatbike no tienen problemas con los neumáticos?
Y una imagen de superación. Si quieres puedes.
