La primera etapa de la Absa Cape Epic ha estado llena de emociones, sufrimiento, caídas y situaciones límite. 96km eran el escenario de la primera jornada en línea de la carrera. Como suele ser habitual, el primer día de cualquier prueba por etapas se acumula la acción y se convierte en una jornada loca, y hoy la Absa Cape Epic lo ha confirmado.
Tras ir desgranándose el grupo de 30 unidades formado poco después de la salida, la primera bajada larga de la carrera ha supuesto toda una escabechina para los corredores, especialmente en la cabeza de carrera. Nino Schurter pinchaba, y su equipo se desentendía de la lucha por la etapa tras el percance. Sauser también pinchaba, lo que dejaba a los líderes de la general en una situación complicada, porque más allá del pinchazo dañaba la llanta de su bicicleta. Aunque el conjunto peor parado sería el de Alban Lakata y Robert Mennen. El segundo chocaba contra un antílope en la bajada y se iba al suelo, partiendo el manillar y dañándose el hombro izquierdo (está pendiente de confirmar si sufre alguna rotura en su clavícula), lo que suponía el fin anticipado de la carrera para el potente Topeak-Ergon.
Entre todo esta vorágine de acontecimientos, tres equipos sobrevivían al caos. Eran el Multivan-Merida de Hermida y Van Houts, y los equipos del Team Bulls, el de Karl Platt y Urs Huber y el de Tim Boehme y Thomas Dietsch.
El Multivan-Merida ponía tierra de por medio y se distanciaba del resto, llegando a rodar con cerca de 4 minutos de ventaja sobre los segundos. Pero los dos equipos del Team Bulls se unían para trabajar juntos y empezar a reducir diferencias. Tras ellos Sauser y Kulhavy circulaban a casi 6 minutos de los líderes, pero lejos de darlo todo por perdido también ponían toda la carne en el asador para reducir distancias para intentar conservar el maillot de líderes.
A falta de 24km para el final la situación empezaba a invertirse. Hermida y Van Houts empezaban a ceder tiempo, con el holandés rodando algo más justo que el catalán. El empuje de los dos equipos del Team Bulls era fuerte y empezaban a recortar tiempo hasta el punto de hacer pensar en una posible caza a los Multivan-Merida, pero finalmente esta no se produjo y Hermida y Van Houts ganaban la etapa.
Sólo faltaba por ver cuanto cederían los hasta entonces líderes. En un final de recorrido espectacular también volaban para dejar su desventaja en poco más de 2 minutos, pero insuficiente para mantener el maillot de líderes que pasa a las espaldas de Van Houts y Hermida.
Imágenes
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